Malasia.- Esta no es una historia cualquiera, es un relato de valor, resiliencia y amor al prójimo. Y es también una invitación a no quejarnos tanto por problemas triviales y empezar a vivir con más gratitud.
En Malasia, en el sudeste asiático, una anciana de 77 años improvisó un camilla flotante, con cuatro tanques, para cuidar -en medio de fuertes inundaciones- de su esposo, Che Noh Che Hassan, de 79, quien está postrado en cama debido a una enfermedad neurológica.
Sucedió en Kuala Berang, donde Zainab Halimah Ismail creó esta camilla para acomodar a Che Noh Che Hassan, de 79, y poder trasladarlo más fácil si las aguas seguían anegando la vivienda.
La anciana también le da crédito a los vecinos por esta idea «salvavidas».
Fuente: Noticias SIN