Ayer el director del COE, general retirado, Juan Manuel Méndez, recibió la visita súbita y no programada, del mayor general estadounidense y en activo, Julián Cheater, director de estrategia, política y planes del comando sur de EEUU y con el supuesto interés de conocer “sobre los trabajos conjuntos y planes futuros de mutua colaboración”.
Es decir, parecería, que ante la probabilidad de que en cualquier momento estalle una escalada nuclear en la guerra-Rusia-Ucrania y lo otro, de que para enero habrá un escenario de ensayo bélico entre fuerzas militares rusas con su contraparte venezolana en procura de “afinar estrategias” comunes ante lo inminente de los aprestos de toma de posesión del nuevo gobierno venezolano.
Que entendamos y cómo hemos dicho en análisis anteriores, que ya las dos naciones que componen la isla de la Española, son y por encima de sus propios intereses nacionales y dentro de un contexto bélico para proteger la última frontera estadounidense en el continente, una especie de base militar de tierra, aire y marítima y dadas la posición geoestratégica de la misma en el Caribe Central.
Frente a esas circunstancias, el estado fallido de Haití, de hecho, una especie de protectorado estadounidense y República Dominicana, estado vasallo de EEUU, que ya ha abierto sus fronteras para uso libre y en principio, de los guardacostas estadounidenses y con el pretexto de “perseguir los navíos y submarinos del narcotráfico”, es evidente que en Washington se encuentran más que preocupados porque buques y submarinos rusos pudieran penetrar a aguas cercanas a las importantes rutas marítimas del Caribe Central y que son limítrofes al Mar Caribe como al Océano Atlántico.
Además, y si se entiende que, durante la susodicha visita, “se coordinó una capacitación para los miembros del COE con la Guardia Costera», es decir, que el COE será una dependencia “pragmática” para el Comando Sur y en caso de guerra y que también se planteó “evaluar el sistema de notificación de alerta a corto plazo, así como “el apoyo técnico para diseñar un plan de continuidad de operaciones”.
Entonces y por obligación habría que colegir, que el COE está siendo convertido en un organismo de alta seguridad de inteligencia e información y que, por la misma naturaleza de los objetivos plantados, ya ha dejado de rendir cuentas al Gobierno Nacional y sí solo al Comando Sur o por aquello de las apariencias, a los dos gobiernos a la vez.
Escenario que también significa, que lo correcto debería de ser, que las comisiones de asuntos de seguridad civil o militar en el Congreso Nacional de inmediato soliciten la interpelación del director del COE y con el objetivo de despejar y dudas y hacer transparentes los acuerdos a que ese funcionario llegó con el alto cargo militar estadounidense y si además estuvo autorizado por el Poder Ejecutivo.
Lamentablemente y conociendo que, en este país, su gente y su gobierno, todo cuanto sea estadounidense y mucho más si es de uniforme, es lo más parecido a una palabra sagrada de cumplimiento inmediato, no abrigamos ninguna posibilidad de que algún senador o algún diputado se pronuncien al respecto desde sus respectivas curules y sin duda, también por lo otro, de que en este país son pocos los ciudadanos que se atrevan a desafiar una disposición estadounidense y salir indemne de la represión “diplomática” estadounidense favorita y como es la supresión de sus visados.
De parte del Gobierno Nacional, cuyo presidente tiene engavetado las peticiones de extradición de seis legisladores imputados por la DEA y fiscales estadounidenses como narcotraficantes, seguro que no dará ningún paso que pudiera molestar a su “socio” estadounidense.
En consecuencia, si se quiere recabar una información cierta sobre los acuerdos colocados en blanco y negro y a resultas de esta extraña visita, que haya que entender que hay que estar ojo avizor y mucho más, cuando el mismo Comando Sur especifica cuáles son sus funciones en el área y que el mismo organismo se describe como “el responsable planificar y conducir operaciones militares y de seguridad, en Centroamérica, Sudamérica y el Caribe, con excepción de Las Bahamas, México y territorios, comunidades y posesiones estadounidenses en la región”.
Con otras palabras, se abroga la función de gran policía y con libertad absoluta para operar sin oposición significativa alguna. Otro dato importante es el siguiente: “El Comando Sur de Estados Unidos cubre 31 países y abarca 24.9 millones de kilómetros cuadrados. Es responsable de proporcionar planificación de contingencia, operaciones, y la cooperación de seguridad para América Central y del Sur, el Caribe (excepto asociados con los EE. UU)”.
¿Acaso no se habló en la reunión del COE, de contingencia, operaciones y cooperación? Entonces está más que claro, que frente a la eventualidad de que la guerra en Europa se convierta en nuclear y aunque sea limitada territorialmente o lo ya pendiente de los ejercicios militares rusos-venezolanos de enero, que el panorama se vea lo suficientemente explicito como para entender, que ya EEUU está ideando un esquema de guerra militar asimétrica y teniendo de base central la isla de la Española al completo.
Sabiendo que tampoco somos tontos y sí analistas bien despiertos y también siempre descreídos, que nos permitimos decirles a quienes nos dispensan el honor de atender nuestras opiniones, que cada uno se forme sus propios juicios y asuma las medidas personales y familiares más significativas y para que si llega el caso y el Caribe Central se convierte en zona de guerra y el Gobierno Nacional decreta “precautoriamente” un estado de sitio y de “emergencia de seguridad” de cara a la zona fronteriza con Haití, nadie se llame a engaño y menos a tomarlo a la ligera y como tampoco debería de ser, que a lo inmediato y de continuar la guerra en Europa en una escalada mayor, no se empiecen a preparar iniciativas de contingencia ante la probabilidad de que los 300 mil dominicanos que viven en la península europea y de golpe nos lleguen en trullas y presentándose un fuerte problema logístico, que si el país no se ha preparado, nos encuentre a todos manos de arriba.
Cómo se ve pues, todo lo que hemos dicho no es para no tomarlo en serio y debido a ese razonamiento, es que decimos, que Europa está al tris de irse a una escalada nuclear en la guerra de EEUU-Reino Unido y la UE contra Rusia y aquí, ni se discute que se pudiera ser una víctima con daños colaterales. Con Dios. (DAG) 19.11.2024
