El reconocimiento a la excelencia en sus respectivas carreras les permitió reunirse en el más alto escenario del deporte dominicano.
Su devoción religiosa les hizo coincidir al tomar la palabra (con Dios como factor principal) para dar gracias a quienes los escogieron para rendirle el mayor honor.
Fue como poner la fresa sobre el helado.
Blindar sus vidas, negándole a la muerte la posibilidad de arrastrarle al olvido.
Félix Sánchez, David Ortiz, Gabriel Mercedes, Miosotis Heredia, Rafael Furcal, Julián Tavárez, José Luis Saint-Claire, Nieve Xue Wu, Carlos Lamarche Rey y Nelly Manuel Doñé, (ocho ex atletas y dos propulsores) desde ayer tienen como morada el Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano.
Gracia divina
“Jamás pensé que iba a conseguir tantos logros en mi vida y mucho menos en el deporte, que iba a enorgullecer a un país de diez millones de habitantes donde no nací”, palabras de un gran atleta, cuya niñez fue rudamente marcada por un matrimonio fallido: Félix Sánchez.
“Todo lo que he logrado ha sido por la obra misericordiosa de Dios”, reconoció el doble campeón olímpico y mundial en atletismo.
Cariño de la gente
“Uno no sabe cuánto la gente lo quiere hasta que no llegan los momentos difíciles”, esto quizás, fue lo más significativo del discurso de David Ortiz, para agradecer la preocupación mostrada por el pueblo dominicano, cuando estuvo a punto de perder la vida.
Fervor patriótico
Gabriel Mercedes, inscrito en la historia del taekwondo como primer dominicano ganador de una medalla olímpica, puso de manifiesto su amor a la patria, con esta comparación:
“La emoción que siento en este momento solo es comparada a la que sentía cuando me ponía el uniforme para representar a mi país en eventos internacionales”.
Romper barreras
“Había un letrero que rezaba: solo para hombres”, recordó Miosótis Heredia al hablar de sus inicios en el levantamiento de pesas, durante el ceremonial.
Ese letrero colgado en un gimnasio de San Pedro de Macorís, en lugar de alejarla, fue talvez la mayor motivación para que Heredia se convirtiera en una de las pioneras dominicanas de esta disciplina.
Realidad de un sueño
Rafael Furcal, Novato del Año de la Liga Nacional en el 2000, premio que precedió a una brillangte carrera en las Grandes Ligas y el béisbol local, contó como su sueño se hizo realidad.
Un impulso
“Debo agradecer a muchas personas por las hoy estoy siendo inmortalizado, en especial a Chilote. Realmente no sé lo que vio en un delgado joven de apenas 138 libras y que sólo tiraba 78 millas al momento que me firmó. Creo que más que talento, vio la necesidad de ser pelotero de un pobre muchacho como yo”.
Así refirió Julián Tavárez el impulso que recibió de Winston -Chilote- Llenas, quien le firmó para los Indios de Cleveland, abriendo las puertas a la carrera que hoy le hace merecedor de la inmortalidad.
Ausentes
Del grupo de diez exaltados, cuatro estuvieron ausentes por diferentes motivos.
Nieve Xue Wu
Las autoridades del Pabellón informaron que por pandemia y compromisos de trabajo, la tenimesista de origen chino nacionalizada dominicana, no pudo asistir al ceremonial.
En su lugar asistió la ex selección nacional de tenis de mesa Olga Vila y el edecán fue Juan Vila, inmortal y ex presidente de la federación.
José Luis Saint-Claire
Fue representado por su hijo del mismo nombre, quien dijo: “Es un día de mucho significado para su familia y para los que como yo estuvimos siempre a su lado”. al recibir los honores conferidos al fallecido ex receptor de la selección nacional de softbol molinete.
Nelly Manuel Doñé
“Dedicó toda su vida al deporte y a nivel institucional tuvo dos grandes amores, el club Mauricio Báez y el Comité Olímpico Dominicano.”, refirió Vladimir, representando a su fallecido padre.
“Soñé con esto muchas veces, pero él aquí y yo sentado en la tribuna como espectador. Estoy orgulloso del legado que dejó mi padre en el deporte y el cual hoy está siendo inmortalizado”.
Lamarche Rey
“Está hoy presente en este escenario en pensamiento y en acción”, expresó Sandra Lamarche Mondragón, al explicar la ausencia de su padre, cuya salud está algo quebrantada.
Agregó que su padre. quien (consagrado dirigente olímpico y miembro fundador de la Federación de Medicina Deportiva). acepta la inmortalización con honor y orgullo, al igual que la familia.
Por: Rafael Martínez R.
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Fuente: El Caribe
