La tregua navideña a partir del 24, un día ante de la celebración del nacimiento del niño Jesús, se impone por encima de los políticos y dura hasta después de Año Nuevo y, en esta ocasión, como sucedió en Israel en su fiesta sagrada, la República Dominicana en descuido por la pascua será atacada esta mañana con una lluvia de USD$6,052 millones de cohetes por su Gobierno que destruirán su futuro.
El Congreso Nacional está convocado para conocer del último endeudamiento del año: La emisión de RD$344,980.2 millones de pesos en bonos que, a la tasa del día, en dólares, son USD$6,052 millones que se suma a los USD$30,000 ya contratados en los últimos tres años: Toda una locura de endeudamiento que compromete seriamente el futuro y la estabilidad del país.
La oposición política ladró a la luna en las últimas semanas denunciando el contrato de Aerodom que ponía en manos del Gobierno para la campaña electoral USD$755 millones de dólares en seis meses. Esta nueva emisión de deuda pone en manos del presidente Abinader nueve veces esa cantidad en las primeras dos semanas del mes de enero del 2024.
El PRM aprovechó el ambiente de cooperación política pasiva del PLD y del PRM en ocasión de la pandemia al aprobarle emisiones para cubrir los déficits del presupuesto emitiendo bonos desde el mes de enero; esas emisiones ya alcanzan los RD$1,879,371.4 millones, casi RD$1.5 billones.
Si llama a preocupación lo escandaloso del endeudamiento que ya hasta a los apóstoles de la deuda y a los organismos internacionales, les preocupa, lo más lamentable es que no hace falta el dinero de esa emisión nueva como no hacía falta la del año pasado, pues se emitió la obligación, se endeudó al país y el dinero no se usó.
Es un endeudamiento criminal e innecesario, primero porque no resuelve ningún problema de dólares, pues las reservas por USD$15,055 millones están bastante altas, tampoco hace falta porque el Gobierno que no ejecuta el presupuesto, en realidad está obteniendo superávits, no sólo porque las recaudaciones han sido superiores a las previstas, sino porque el gasto no se ha efectuado. Basta ver el ejemplo del MINERD, ministerio al que le sobró el equivalente al presupuesto de otros 8 ministerios.
Tampoco hace falta porque en toda buena ejecución presupuestaria que no es más que el flujo de caja del Gobierno aplicado a políticas públicas se parte del excedente del año anterior y, sólo en el Banco de Reservas, el Gobierno tiene más de RD$347 mil millones guardados en certificados en el Banco. Es decir, cierra con un excedente más grande que el déficit previsto.
En contra de toda lógica estamos cogiendo préstamos en enero, que nos cuestan un dineral en intereses, para cubrir déficits del resto del año que no se produce: en realidad es una práctica de engaño para guardar dinero y blofear de una bonanza ficticia.
Suponga como cualquier lego que ese dinero nos cuesta 5% anual, esto indica que USD$6,052 millones emitidos en bonos, sin necesidad, cuestan al año USD$302.6 millones en intereses, lo que indica botamos RD$17,248 cada año y, eso ha sucedido en los últimos tres. Eso en un país pobre es un crimen en contra de la patria.
Me visitó hace unos días el diputado Rafael Crespo, quien me confirmó la convocatoria a la Cámara de Diputados hecha por mi amigo el diputado Rafael Pacheco, que obligado por la línea partidaria, es tristemente compromisario de la política de endeudamiento de su partido, que es contraria a la línea histórica del presidente Balaguer, el mejor testigo de los efectos que sobre la soberanía nacional tiene el endeudamiento, pues la primera invasión norteamericana, fue para cobrar una deuda del siglo anterior por la emisión de bonos, como ahora sucede: Entonces la deuda precedía a la invasión para cobrar. Ahora basta con desconectarte del sistema internacional para convertirte en un paria.
Igual que antes, sucumbe la patria y pagan los más pobres, por eso la carestía de los alimentos. Ella esconde que el dinero del país es para pagar intereses. Por: Angel Lockward [Listín Diario]