La derecha mediática anti haitiana, ahora quiere que a los haitianos se les impida pasar por aquí e irse por la via aérea a Centroamérica y para luego hacia EEUU y lo que sería una flagrante violación de la libertad de tránsito de todas esas personas y sin importar su nacionalidad. Tanta crueldad no puede darse

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Cada día es mayor el rencor que la derecha mediática dominicana le tiene a los ciudadanos haitianos de clase media baja a ciudadanos de a pie, sea que vivan en el territorio nacional o que de su país pasen por uno de nuestros aeropuertos internacionales y salgan a Centroamérica para tratar de cruzar por México hacia EEUU.

Al mismo tiempo y de acuerdo con nuestras fuentes, desde sectores de la embajada estadounidense en la capital nacional e igual determinados funcionarios en consulados estadounidenses y ni hablar de funcionarios estadounidenses ligados a funcionarios dominicanos de inmigración y de la presidencia y también del mismo ministerio de Interior y Policía, hacen lo indecible por susurrarle a nuestros funcionarios, que impidan que los haitianos “salgan de aquí para Centroamérica y de ahí a México”.

Por lo que hemos sabido, los funcionarios estadounidenses que están detrás de semejante afectación de los derechos humanos, confían en entender que tienen al gobierno del presidente Abinader agarrado al completo y ante lo cual, asumen  “que los dominicanos no se atreverán a ir en nuestra contra” y refiriéndose a los funcionarios del gobierno del PRM más directamente relacionados con la embajada e incluyendo militares, a los que los agregados militares se encargan de hacerles ver el interés de Washington para que esta “medida administrativa” se acate.

Desde luego, hasta ahora, nada ha trascendido públicamente sobre este particular, pero como ya se ha estado observando los remilgos y peros que los funcionarios de migración le ponen a los pasajeros haitianos cuyo destino sea Centroamérica, que lo menos que haya que decir, que este es un asunto que el mismo presidente Abinader  debe fijar las precisiones de lugar y en particular, se aspira a que disponga que migración no tiene que impedir para nada, que esos viajeros haitianos quieran salir de aquí hacia el país o territorio que les venga en ganas.

En este sentido, ya está bueno que los funcionarios dominicanos actúen como empleados o personeros de funcionarios del gobierno estadounidense y entiendan, que todavía República Dominicana es una nación independiente y soberana que toma por sí sus propias decisiones.

Además hay un hecho determinante para que el gobierno dominicano no vaya a caer en semejante exceso y despropósito: Qué Haití es nuestro primer socio comercial en el área y este Continente y el número seis en el mundo y  al comprarnos bienes y servicios por más de 700 millones de dólares estadounidenses anualmente, en tanto comerciantes y pueblo haitiano, adquieren en nuestros mercados fronterizos, productos y servicios por no menos tres millones de dólares cada mes y que para nuestra economía, significan más de 250 mil empleos directos y cerca de medio millón indirectos.

Hasta ahora, el presidente Abinader ha llevado con voz y determinación firme, que la comunidad internacional se preocupe y contribuya a resolver la grave crisis de vida e institucional haitiana y haciendo lo que hacemos los dominicanos, abriéndole nuestras puertas para que no solo compren productos dominicanos sino garantizando que no menos de un millón de mano de obra haitiana esté trabajando en nuestra nación.

Y si lo anterior es así, sería inconcebible, que sea precisamente este país el que trate de bloquear o impedir que los ciudadanos haitianos vayan a nuestros aeropuertos y cualquier día se encuentren con que no se les permite viajar por Centroamérica y porque nuestro “primer socio comercial” así lo haya determinado.

Al mismo tiempo, llama la atención y lo que no es una coincidencia, sino un movimiento financiado con parte de los dineros que desde la embajada USA se destinan a incentivar a los grupos de intolerantes dominicanos anti haitianos y con miras de que hagan marchas “patrióticas” como la que se supone ocurrirá hoy en Santiago o presenten declaraciones alarmistas y en la prensa amarillista mercancía y con el interés de abrumar a la nación, con noticias falsas y avivar temores sobre la supuesta invasión pacifica haitiana que dicen que existe y como es el caso del principal brazo de agitación, representado por el Instituto Duartiano, el reducto más significativo de los ultranacionalistas que abogan por que Haití desaparezca.

Lo grave es, que toda esta situación, ahora encuentra eco en la derecha mediática criolla y sus aliados izquierdosos supuestamente anti-EEUU, pero pagados por agentes estadounidenses en este país y cuyo abierto propósito, es presionar a la clase gobernante dominicana, para que las fuerzas vivas nacionales puedan ser manipuladas dentro del esquema de ola anti haitiana que se quiere hacer creer es producto directo del supuesto encono dominicano contra nuestros vecinos más inmediatos.

Otro aspecto por destacar tiene que ver con que en el territorio nacional y contados desde el primer censo de población y familia del 1920 que registró 20 mil ciudadanos haitianos residentes legales, hay un millón de personas que son ciudadanos y familias dominicanas de origen haitiano y representando a cinco generaciones y que es un renglón, que el mismo gobierno de Abinader y ante las presiones que le hace EEUU contra los haitianos, debe y tiene que tener muy en cuenta.

La muestra de lo que decimos sobre este saludable incremento poblacional mixto, la tenemos en los nuevos héroes deportivos dominicanos y en los que resalta un 20 por ciento de deportistas dominicanos de origen haitiano y la pregunta es una, ¿cómo el gobierno del PRM que encabeza Abinader y en cuyo partido existe una muestra interesantísima de dominicanos de origen haitiano o de árabes-dominicanos con raíces haitianas, se pudiera atrever por realizar la persecución insensata que hoy se publica con gran alarma en el matutino centenario capitaleño?

Es de esperar, que desde la presidencia de la República no se caiga en el grave error de atender los aparentes reclamos diplomáticos y consulares estadounidenses contra ciudadanos haitianos que tomen nuestro país de puente aéreo para trasladarse a otras naciones del mundo o en particular hacia Centroamérica.

Sería y esto hay que advertirlo, una gran vergüenza nacional que esto se hiciese y lo que nos impulsa a manifestar, que la derecha mediática anti haitiana, ahora quiere que a los haitianos se les impida pasar por aquí e irse por la via aérea a Centroamérica y para luego hacia EEUU y lo que sería una flagrante violación de la libertad de tránsito de todas esas personas y sin importar su nacionalidad. Tanta crueldad no puede ser. (DAG)