Vincho está rotundamente equivocado. No se está en la guerra fría donde todos los gatos se parecían y el odio estaba a flor de piel

0
128

Ayer, el abogado y activista político Vincho Castillo emitió una soflama y de esas directamente dirigida para congraciarse con el poder y en base a la cual, negando el derecho al libre disentimiento, arremete contra el Partido de la Liberación Dominicana acusando a la formación política de pretender desestabilizar el sistema político, cuando lo que ha ocurrido, es que el PLD viéndose amenazado por el brazo propagandístico del gobierno y del PRM, sus responsables entendieron que no podían quedarse mudos ante la avalancha de imputaciones que a la formación política se le hacían y con el pretexto, de que miembros de la misma y exfuncionarios de su último gobierno y por lo que el ministerio público a dicho, parece que crearon una abusiva como intolerable asociación de malhechores para desfalcar al Estado y lo que ciertamente es más que reprochable.

Pero resulta, que Vincho, acostumbrado al dicterio, la simulación y la soflama y hacerse el oportuno entre la parte de fanáticos que cobija el PRM e indudablemente, con el interés de que su partido de bolsillo sea tomado en cuenta por el gobierno, emitió una alarmista declaración, hija de su creencia, de que en este país todo está igual y estacionado en el tiempo de cuando la Guerra Fría y lo que rotundamente no es así.

Para empezar, son nuevas generaciones las que están al frente de la vida política nacional y también nuevas políticas y lo más importante, que esa pretensión de Vincho y tan falsa, de que se está en lo peor del dogmatismo político, la toma de pretexto y se le va al cuello a la República y con pretensión de asustarla y hacer creer que el gobierno del presidente Luis Abinader se encuentra al borde de ser derrocado y por lo que, él y en papel de “salvador de la patria” entiende que debe rescatarlo.

En este sentido y sin aportar prueba alguna de lo que dijo, el abogado ya en retiro y en su última etapa de vida, se permitió decir: “Advierto sobre ominosos signos que sugieren se está gestando un peligroso plan de turbación y desestabilización de la paz nacional, promovido por cuadros de la alta cúpula dirigencial del Partido de la Liberación Dominicana”.

Una acusación ciertamente atrevida, toda vez que lo único que hasta ahora ha ocurrido, es que una comunidad política que se siente agraviada y acusada de hechos cometidos por miembros suyos que pertenecían a la cúpula de su pasado gobierno, Vincho la quiere colocar como si el PLD al completo tuviera culpa de las imputaciones que el ministerio público y en todo su derecho, le formula a los imputados en el caso Calamar y ante lo cual y por la gran perversidad que la soflama encierra, en POR EL OJO DE LA CERRADURA entendemos que hay que salirle al paso y para que nadie se confunda.

Tampoco es verdad y como dijo el abogado en retiro, que “el sector político que se atreva a atentar contra la paz nacional debe ser combatido y aislado por todos los hombres y mujeres de buena voluntad de este país y por todas las fuerzas políticas y democráticas responsables” y simplemente, porque en su delirio tan emocional y lenguaje de guerra fría, Vincho entienda que debe arrastrar al presidente  Luis Abinader a que se comporte con nerviosismo y no aceptando el derecho a que cada quien pueda disentir de sus ejecutorias.

Abinader es un presidente democrático que está apuntalado firmemente en el corazón y voluntad de quienes le respaldan y para nada debe recurrir a medidas de restricción de las libertades públicas y menos, porque haya gente y como Vincho, de que a la primera demostración cruda de rechazo al ataque frontal que se le perpetra y que es el caso del PRM contra el PLD, asume que el mundo se estuviera acabando o que viene un apocalipsis.

Nada de eso, la democracia criolla es lo suficientemente firme y fuerte para enfrentar y resistir cualquier tipo de situación irregular que pudiera afectar la paz pública y para ello no es menester que voces agoreras y extremistas, quieran hacer creer que por un movimiento de autodefensa legitimo mostrando su oposición sobre lo que se le quiera acusar y nos referimos al PLD, este no tenga derecho a exigir que se le respete y que no se le formulen acusaciones atrevidas.

Desde luego, en toda colectividad política hay cabezas calientes y de esto Vincho sabe mucho y las que por ser espontaneas e incontrolables, la dirigencia de ningún partido puede controlarlas, pero si advertir y lo que hizo el PLD, de que no se altere la paz pública y tampoco afectar el orden social.

Cómo medio de comunicación y de información de masas, lo advertimos, pues lo último que puede esperarse, que sectores radicales dentro de las fuerzas vivas quieran pescar en río revuelto y ahora con las apariencias, de un ciudadano todavía venerable para sus simpatizantes y disfrazado de postrero agitador social y político. (DAG-OJO) 31 de marzo de 2023.-el país político-