Varias organizaciones no gubernamentales y la empresa Tetra Pak donaron a tres familias de recursos limitados igual cantidad de viviendas, construidas con planchas de polialuminio, producto del proceso de reciclado de los envases de la compañía.
La iniciativa tiene el objetivo de mejorar las condiciones habitacionales de recicladores y promover la construcción de viviendas ecoamigables.
Para la edificación de las casas, cuya distribución oscila entre los 45 y 60 metros cuadrados, aproximadamente, se utilizaron soportes hechos con bloques de concreto y madera y un recubrimiento de techos y muros de planchas de polialuminio, elaboradas hasta con un 70 % de material derivado de los envases de Tetra Pak reciclados.
En el levantamiento de las viviendas participaron también Hábitat para la Humanidad República Dominicana, la RED Latinoamericana de Recicladores (RED Lacre) y el Movimiento Nacional de Recicladores de la República Dominicana (MNRRD).
El proceso de escogencia de las tres familias beneficiadas, que viven en las provincias de Azua y San Juan, estuvo a cargo de un equipo que evaluó los perfiles de los candidatos. Uno de los requerimientos esenciales exigidos para ser beneficiario del proyecto fue el contar con el aval de la propiedad del terreno, además de ser reciclador de oficio y dedicarse a la gestión de residuos sólidos en la zona de residencia.
“Con esta iniciativa queremos reconocer la labor de tres familias, cuyo oficio es el reciclaje. No solo para destacar la labor que realizan, sino también para mejorarles su calidad de vida. Contar con una casa digna es, sin duda, esencial para la vida de cualquier ser humano”, afirmó Guillermo Pugliese, director de Sostenibilidad de Tetra Pak para Centroamérica y Caribe.
Dentro de los beneficios de construir con estas tecnologías sobresalen el Sistema de Depósito, Devolución y Retorno (SDDR), además, estas casas tienen ventajas térmicas, ya que concentran menos transferencia de calor, lo que representa un menor consumo de energía y ofrecen un mayor confort para las familias, aseguró Betsaida Santana, gerente de Programas de Hábitat Dominicana.
Este primer proyecto piloto aspira ser el inicio de una iniciativa que busca en primer lugar dignificar y reconocer la labor del recolector de oficio, así como promover la recolección y reciclaje de los materiales aprovechables. [Diario Libre]
