SAN FRANCISCO – Después de ayudar a los Gigantes a hacerse con el título de la Liga Nacional Oeste en el último día de la temporada regular, Logan Webb describió el momento como el mejor juego de su carrera, «hasta ahora».
Ese calificativo demostró ser profético, ya que solo tomó cinco días para que el as naciente de 24 años se superara a sí mismo.
Webb deslumbró en su debut en los playoffs el viernes por la noche en Oracle Park, ponchando a 10 en 7.2 entradas para llevar a los Gigantes a una victoria por 4-0 sobre los Dodgers en el Juego 1 de la Serie Divisional de la Liga Nacional.
Buster Posey, Kris Bryant y Brandon Crawford conectaron cuadrangulares para respaldar la magistral actuación de Webb, dando a los Gigantes a una ventaja de 1-0 en este SDLN al mejor de cinco entre los rivales de toda la vida.
Webb, oriundo de la cercana Rocklin, es el abridor más joven de San Francisco, pero continuó prosperando en el gran escenario, limitando a los Dodgers a cinco hits y sin bases por bolas, convirtiéndose en el cuarto lanzador de los Gigantes en ponchar al menos a 10 bateadores en su primer juego de postemporada.
También se unió a Jake Arrieta (Juego de Comodines de la Liga Nacional 2015) como el segundo lanzador en la historia de la Liga Nacional/Liga Americana en tirar al menos siete entradas en blanco, ponchar a 10 y no caminar ninguno en un debut en postemporada.
Webb es conocido por su sinker poderoso, pero se apoyó en gran medida en su combinación de cambio y deslizador y terminó la noche con 21 swings abanicados, igualando el récord personal que estableció contra los Cerveceros el 2 de septiembre.
«Es realmente genial», dijo Webb. “Sueñas con estos momentos cuando creces como jugador. El solo hecho de poder ser parte de él y hacerlo es algo especial, seguro».
La actuación de Webb lo puso junto a dos íconos de la franquicia, ya que se unió a Tim Lincecum (Juego 1 de la SDLN 2010) y Madison Bumgarner (Juego de Comodín 2014 de la Liga Nacional) como los únicos abridores de los Gigantes en acumular 10 ponches y lanzar al menos 7.2 entradas sin anotaciones en una apertura de postemporada.
Posey, quien estuvo detrás del plato en las dos instancias anteriores, dijo que la salida de Webb le recordó el esfuerzo legendario de Lincecum, quien ponchó a 14 en nueve entradas en blanco en su debut en postemporada contra los Bravos en 2010.
«Creo que Timmy terminó con nueve ceros con eso, pero creo que Logan tenía el potencial para hacer eso esta noche si se queda ahí», dijo Posey. «Fue un gran rendimiento. Creo que lo que me impresiona es que sea capaz de controlar la energía y los nervios extra, no solo en este juego, sino en el último juego de la temporada. Realmente lo ha llevado a un nivel superior».
Los Gigantes tuvieron la oportunidad de elegir a Webb o Kevin Gausman como abridor del Juego 1, pero decidieron entregarle la bola a Webb, quien se convirtió en el abridor más dominante del club en la segunda mitad. No ha perdido una decisión en 21 aperturas consecutivas, la segunda racha más larga en la historia de la franquicia detrás del miembro del Salón de la Fama Carl Hubbell, quien tiene el récord con 22 entre 1936 y 1937.
Los Gigantes están invictos en las 13 aperturas de Webb en Oracle Park este año, ya que mejoró a 7-0 con efectividad de 1.78 en sus últimas 14 apariciones en casa.
«Creo que lo hemos estado viendo durante meses», dijo Crawford. “Fue agradable para todos los demás poder verlo. Webby es necio».
Webb admitió haber sentido algunos nervios en la primera entrada, pero logró mantener la compostura incluso mientras lanzaba a través del tráfico y un par de errores raros de la defensa de los Gigantes durante toda la noche. Permitió un sencillo contra la formación defensiva a Mookie Betts para abrir el juego, pero dejó varado con éxito al corredor en tercera al dar una patada salvadora para tumbar un potencial sencillo productor del bate de Justin Turner.
Después del hit de Betts, Webb retiró a nueve en fila antes de permitir que Corey Seager llegara a salvo en un error de fildeo para comenzar el cuarto, pero regresó para ponchar a Trea Turner con un cambio y luego se benefició de una hábil doble matanza 4-6-3 que comenzó con un impresionante pase con el guante por el segunda base Tommy La Stella.
«Eso fue enfermizo», dijo Webb. «Eso fue asombroso. Gritaba y gritaba. Creo que todos gritaban y gritaban, pero es una jugada especial».
La combinación de sinker-slider de Webb marcó su ascenso en la segunda mitad con los Gigantes este año, pero alteró su combinación de lanzamientos contra los Dodgers, lanzando 38 cambios (41%), lo más alto de su carrera, e induciendo 12 abanicados con el lanzamiento, lo más alto un solo juego.
“Tiene tres lanzamientos que son de élite, por lo que definitivamente es un lujo de mi parte elegir y elegir dependiendo del juego y la alineación que tenemos y la acción que estoy viendo en sus lanzamientos para ver en cuales descansar más”, dijo Posey.
Los Dodgers lucharon por poner en el aire las ofertas de Webb, terminando la noche con 11 roletazos, 10 ponches y dos elevados. Webb tiene ahora marca de 2-0 con efectividad de 1.52 contra Los Ángeles esta temporada.
«Para ser bien honesto, no hicimos ajustes», dijo el mánager de los Dodgers, Dave Roberts. “Pienso que tuvo buen dominio esta noche, principalmente del lado del guante contra los bateadores de la mano derecha. Luego, el deslizador, el cambio a continuación, y simplemente pescamos mucho más de lo que deberíamos. Si no haces ajustes, ellos seguirán yendo al pozo, y esa fue la historia”.
Webb subió al montículo en el octavo, pero fue eliminado después de ceder un sencillo con dos outs a Betts y salió del campo con una atronadora ovación de la casa llena.
«Logan, la estrella de la noche», dijo Bryant. “Estoy tan impresionado con él. Su primera experiencia en los playoffs y simplemente estaba fingiendo que era un juego en el patio trasero. Fue muy divertido de ver. Muy divertido.»
Los Gigantes esperan que sea solo el comienzo para Webb, cuya confianza continúa aumentando junto con su estrellato.
Fuente: El Caribe
