Desde 2011, las masivas afluencias de sargazo se han convertido en un fenómeno negativo y recurrente, que afecta no solo a las costas y ecosistemas marinos de la República Dominicana, sino también a sectores críticos de nuestra economía como la pesca y el turismo. No obstante, esta adversidad representa también una ventana de oportunidad para la innovación y el desarrollo sostenible a nivel nacional.
En el Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC) se realizan investigaciones orientadas a convertir este problema ambiental en una ventaja. Una de las iniciativas más destacadas es la transformación del sargazo en biofertilizante, aplicable a nuestra agricultura nacional.
Los estudios preliminares en diversos cultivos han arrojado resultados prometedores. A modo de ejemplo, en cultivos de bananos la aplicación del biofertilizante líquido basado en sargazo no afecta la emisión foliar de las plantas, al contrario, mejora el diámetro de las plantas y contribuye a controlar a la Sigatoka Negra, manteniendo los signos de esta enfermedad por debajo de los umbrales de alerta. De igual forma, su aplicación no afecta la flora bacteriana del suelo; en cambio, ayuda a mantener indicadores favorables del mismo.
El enfoque problema-oportunidad busca en este caso abordar dos problemas nacionales significativos: la mitigación de los impactos negativos generados por las recurrentes afluencias de sargazo y el desarrollo de alternativas para una agricultura más amigable con el medio ambiente y la salud humana, disminuyendo la dependencia de productos químicos tóxicos.
Para los interesados en explorar las posibilidades del sargazo como biofertilizante, INTEC ofrece capacitaciones, asistencia técnica y acceso a investigaciones de vanguardia. El objetivo es proporcionar a la comunidad agrícola las herramientas y conocimientos necesarios para adoptar estas innovaciones, asegurando una transición exitosa hacia prácticas sustentables y económicamente viables. Por: Yaset Rodríguez Rodríguez [Listín Diario]
