A través del subsidio extraordinario para los combustibles y que ha dispuesto el Gobierno, hasta octubre, el costo de mitigar el impacto del precio de los combustibles le restó al Estado unos RD$263.4 millones, según información ofrecida por el viceministro de Comercio Interno, Ramón Pérez Fermín. Pero no dice que le ahorró mil millones de pesos en disturbios sociales. El gobierno y de demagogo, dice que “el costo de subsidiar los hidrocarburos son una alta carga para el presupuesto nacional”. Y lo que no es cierto, pues este se alimenta de los impuestos que los contribuyentes pagan y de los que solo el 25 por ciento se pierde en corrupción política y administrativa. [DAG-OJO]
