Las fuerzas armadas de Estados Unidos con los M1 Abrams, Reino Unido con los tanques Challenger 2 y Alemania con los Leopard están inmersas en una operación aliada para transferir cientos de carros de combate a Ucrania en un intento de frenar el avance ruso y recuperar el territorio perdido en el este del país tras la invasión ordenada por Vladimir Putin. Rusia pretende enfrentar los batallones occidentales con el despliegue de su tanque más avanzado, el T-14 Armata. El general ruso Sergey Lipovoyha asegurado que el carro de combate del Kremlin es muy superior tecnológicamente en un aspecto sobre las variantes comprometidas por los aliados occidentales.
El alto mando militar ruso, en declaraciones a News.Ru, aseguró que el T-14 Armata ofrece una ventaja sobre los Abrams, Leopard y Challenger en la protección de la tripulación de los proyectiles enemigos gracias a su diseño acorazado. En los tanques occidentales, explicó el experto, la tripulación está colocada uniformemente dentro del casco, mientras que en el T-14 está en una cápsula blindada, con la torre vacía, lo queaumenta la capacidad de supervivencia de la tripulación cuando es atacada por armas antitanque, dijo Lipovoy, presidente de la organización "Oficiales de Rusia" y distinguido como héroe de la Federación Rusa.
En caso de un ataque directo en la parte frontal, la tripulación puede seguir disparando y no sufrirá daños, añade. El fabricante del carro ha asegurado en el pasado que es el primer caso en el mundo en el que la tripulación del tanque queda separada de la carga de municiones.
