Desde que las fuerzas ucranianas comenzaron a recuperar terreno en detrimento del ejército ruso, comenzaron los rumores sobre la intención de Vladimir Putin de recurrir a las armas nucleares para acabar con el enemigo. A pesar de que son muchos los rumores sobre el estado de salud de Putin y su resistencia a reconocer la derrota, el presidente ruso ha continuado realizando apariciones públicas, ha supervisado maniobras militares y ha mantenido reuniones de alto nivel con los responsables del ejército.
Cuando se dispararon los rumores sobre el uso de armas nucleares, Rusia atacó con drones casi una veintena de ciudades, sobre todo edificios de civiles y algunas estructuras importantes como centrales eléctricas. El objetivo era claro. La moral de los ucranianos sigue muy alta y el objetivo es quebrantarla. Y la mejor manera es el miedo, sentir que no están seguros en ningún lugar. La segunda forma es el aislamiento energético. Con la llegada del frío, se hace necesario el uso de energía para poder soportar el crudo invierno. La destrucción de infraestructuras y la falta de recursos era el camino elegido.
Ahora, mientras Estados Unidos, Corea y Japón comienzan a movilizarse por la amenaza nuclear rusa, Putin está dispuesto a pasar al siguiente nivel: un ataque hipersónico. Las fuerzas especiales rusas están equipadas con un dispositivo especial que puede anular todos los dispositivos electrónicos dentro de un radio de 9,6 kilómetros. Esto dejaría en una profunda oscuridad a los habitantes de la zona atacada.
Estas armas, llamadas EMP funcionan creando un pulso electromagnético tan grande que provoca un cortocircuito en los dispositivos enemigos, según explica el diario “Times”.
Estos dispositivos suelen colocarse en misiles nucleares como el Zircon y que se disparan 200 kilómetros hacia arriba y dejan fuera de servicio un área del tamaño de Estados Unidos, según la NASA. Pero los misiles no nucleares afectarían solamente a un radio cercano a los 10 kilómetros.
Según Justin Bronk, investigador sénior de potencia aérea y tecnología en el equipo de ciencias militares del Royal United Services Institute RUSI británico, Rusia tiene una reserva de armas EMP listas para funcionar y dijo que algunas unidades del grupo de élite Spetznaz en Ucrania –que pueden estar detrás del sabotaje del gasoducto Nord Stream– ya están equipadas con ellas. “Los ataques EMP dejan muy poco rastro visible, por lo que es difícil saber si ya se ha utilizado uno sin estar allí en el terreno para investigar”, dijo. El pasado mes de julio, El kremlin ya anunció que disponía de un nuevo cañón para lanzar estas armas
El analista británico experto en defensa, Francis Tusa, explicó que Rusia “ya ha estado intentando hacer que Ucrania sea lo más inhabitable posible antes del invierno”. “Así que no descarto la posibilidad de un ataque EMP”.
En el caso de que Putin decidiera realizar este ataque, podría tensar mucho más la relación con Occidente y con los países de la OTAN porque el ataque hipersónico podría destruir infraestructuras de los países aliados, lo que podría considerarse como un ataque directo.
Para el experto en guerra electrónica Thomas Withington “el gran peligro para el gobierno ruso es que una vez que realice una detonación nuclear EMP corre el riesgo de perder el control estratégico de la situación, ya que no puede saber con certeza cómo podría actuar la comunidad internacional y, lo que es más importante, la OTAN”.
Rusia tiene un potente arsenal nuclear, con más de 6.000 cabezas nucleares, suficientes para destruir el mundo y provocar hasta 300 millones de muertos. Por: Paco Rodríguez [La Razón]
