Desconocemos cual es la razón de que de tres meses atrás, las carreteras han sido convertidas en puntos de producción económica de extorsionistas de uniforme y los que realmente están abusando de los conductores y con cualquier pretexto.
Ya se está pasando de castaño a oscuro. Sería bueno que el presidente Abinader fuera de incógnito en un vehículo normal y preferentemente en horas de la noche o en las cercanías de los puntos de peaje, para que compruebe la grave situación que se está suscitando.
No vamos a decir más, pero esos policías extorsionistas que abusan de su condición de tener fe pública están llevando su abusiva actitud de extorsión a unos niveles que cualquier día generará una gran desgracia humana.
Para colmos y cuando ven que el conductor no cede y este les demuestra que no ha cometido ninguna violación, entonces pretenden incautar el vehículo, cuando no tienen derecho a ello, ya que todo auto, camioneta, camión, etc. es una extensión del domicilio del conductor y de acuerdo con la ley vigente.
Encima de tanto abuso de poder, ahora también le han caído como a la conga a los vehículos de alquiler y en particular para turistas, donde la extorsión entonces aumenta a peor. Presidente Abinader, ¿usted no puede resolver esta maldita situación que tiene a los conductores al coger la loma? (DAG-OJO)