InicioPor el Ojo de la CerraduraLa Policía. ¿Más segura y confiable?

La Policía. ¿Más segura y confiable?

Cómo en el gobierno pueden hablar de que la policía ahora será más segura y confiable, cuando apenas 1,150 efectivos han sido utilizados para una nueva iniciativa a favor de la seguridad ciudadana y en una institución que tiene 35 mil efectivos y de los cuales, 15 mil son espalderos de funcionarios y jefes de uniforme, periodistas y empresarios y solo una de sus divisiones está compuesta por delincuentes y sicarios de uniforme?

Por supuesto, el que haya el interés de que la institución mejores sus métodos y hábitos, sin duda que es una buena pretensión en su plana mayor como en el ministerio de Interior, pero, es imposible que la gente no tenga dudas, cuando ya es recurrente la práctica de asesinatos colectivos, es decir, ejecuciones extrajudiciales o es una práctica viva, la colocación de supuestas pruebas sobre sobre supuestos hechos criminales supuestamente practicados por ciudadanos comunes y corrientes y lo que absolutamente nadie cree y por las constantes violaciones de derechos ciudadanos que se cometen.

Además, no hay día que algún policía no lastime a algún ciudadano o lo meta preso arbitrariamente o como es el caso de un teniente coronel comandante de plaza, prohibiendo determinada indumentaria en los jóvenes  u otro el no uso de sitios de patinaje en los parques públicos y para no dejar de mencionar las constantes afectaciones de la libertad de tránsito y de registros arbitrarios  que siempre son hechos por policías “búscame lo mío”, todos esos que de la extorsión y el macuteo han hecho una práctica común y aceptada por los jefes?

Incluso se ha llegado al extremo, de que no hay parte del territorio nacional en el que las arbitrariedades y agresiones policiales más inverosímiles no se multipliquen o que la brutal represión policial ha llegado a unos niveles, que todos los ciudadanos que son detenidos en horas de la noche, si sus familiares quieren que sean liberados, sino facilitan determinada cantidad de dinero, es imposible que recobren su libertad.

Entonces, cuando todo el mundo es y prácticamente, testigo de tantas tropelías policiales, ¿cómo en el gobierno pudieran creer que los ciudadanos responderán a sus llamados de que supuestamente la policía está cambiando?

¿O también se desmentirá los constantes atropellos en los sitios de esparcimiento público y negocios de bebidas, en donde con el pretexto de que por la música a mucho volumen, la represión policial se lleva los equipos, cierra los negocios y al que proteste se le mete preso o donde dejamos el robo de motores y la quita de los documentos de estos?

Es decir, las agresiones son tantas, que los ciudadanos, no es que estén al punto de coger el monte sino que prácticamente la gente está a punto de sublevarse y por la indignación que le representa tantos atropellos policiales.

Así mismo y en la misma vertiente, ¿acaso la autoridad policial desconoce que los ciudadanos están al tanto de la repartidera semanal de dinero producto del macuteo y la extorsión y que se lleva a la práctica tanto en el palacio policial como en los cuarteles de los barrios de las ciudades y también en los otros de comando de regiones? 

¿Tampoco en el gobierno desconocen lo que todo el mundo sabe, respecto al enriquecimiento de la oficialidad, suboficiales y clases conectados con jefes y como producto del sicariato a favor de empresarios y narcotraficantes o por favores a tutumpotes?

Y para colmos, lo que se conoce y que es una práctica de los últimos veinte años, es que los gobiernos miran al otro lado y no quieren saber de cuantos son los ingresos ilícitos y para poner un candado a toda la plana mayor policial, cuyas fincas, autos de lujo y escandaloso modo de vida delata a sus integrantes y la mayoría generales y coroneles grado completo (full) como lo más parecido a ser pillos de uniforme?

¿Por qué asuntos internos no se ocupa de investigar el enriquecimiento ilícito de la mayoría de los policías?, ¿un ejemplo? La mayoría de los que están destacados en la llamada policía turística, no solo tienen acceso libre de pago y cuantas veces quieran, a habitaciones hoteleras y al consumo que quieran, sino que una mayoría exhibe yipetas de siete millones de pesos y villas de no menos 20 millones de pesos y en retribución por ser un ramal policial «privado» de hoteleros y empresarios turísticos, quienes a su vez les ofrecen grandes facilidades para el negocio que sea y si también  cumplen con «el derecho de cama» y paralelamente como cabezas del turismo sexual?

Cuando todo este panorama se ve o se descubren los casos de ciudadanos que depositan sus dineros en los bancos donde son habituales y  uno que otro policía de servicio en las calles, se entera de que alguien anda con mucho dinero y en un país en el que no es delito andar con dinero en efectivo y cual que sea la cantidad, de inmediato se le persigue para robárselo y no se logra, ¿acaso no es verdad y como ocurrió recién, que “los afectados”, salen en busca de colegas que esos policías delincuentes buscan su auxilio para que los ayuden y cuando hacen los registros y no encuentran nada, entonces a los ciudadanos vejados les colocan en los vehículos ya asaltados, paquetes de drogas ilícitas o sino en sus casas de familia y les caen como a  la conga para meterles presos y hacer que algún juez los condene y por tiempo largo y como ocurrió recientemente o tres semanas atrás en la Barranquita de Santiago, donde hubo una persecución y tiroteo protagonizado por sicarios policiales y asesinando públicamente a cinco ciudadanos a los que para colmos,  les crearon expedientes delictivos?.

Sucediendo, que cuando la gente tiene conciencia de todo esto y a poco, miles de ciudadanos y de noche, dejan de salir a la calle y para no exponerse a la represión policial y para no hablar de que en horas de la noche, quien viaja por carretera en su vehículo propio, se expone a que patrullas policiales les detengan, les incoen un procedimiento arbitrario de abuso de poder y si no dan dinero o acceden a sus gustos sexuales, les fabrican expedientes y los meten presos? ¿Se nos va a decir, que nada de esto está ocurriendo diariamente y por todo el territorio nacional?, ¿puede declarar el actual director o jefe policial, el nivel multimillonario de sus bienes y adquiridos desde que llegó al cargo?

De este modo y como si fuera una gran burla, en los periódicos y los periodistas que son protegidos de la policía, aparecen historias y comentarios hirientes tratando de desmentir esta ola de criminalidad policial y para contrarrestar, el gobierno reacciona con una supuesta iniciativa de dizque corrección policial, que nadie cree, cuando en los hechos, la policía está practicando una especie de toque de queda ilegal y en algunos casos hasta política de estado de sitio y justificándolo “porque hay una gran delincuencia social” y encima poniendo a circular el dato de que ya se está “con una policía más segura y confiable”?

Claro está, NO toda la policial está penetrada por la delincuencia de uniforme, pero sí por una gran mayoría y por eso y por ninguna parte, los ciudadanos no encontramos la policía modelo de la que se nos habla y así vamos, queriendo creer lo que el gobierno dice o que Interior y Policía pregona, pero comprobando cada vez que todavía la nación está muy lejos de tener una policía segura y confiable y menos, cuando los que son serios y de educación, no se atreven a denunciar a los compañeros que son de la delincuencia de uniforme. En consecuencia nadie cree en la policía y mucho menos se le tiene confianza. Con Dios. (DAG) 16.12.2025

última actualización: 09:52 am.

imagen: Policías exhibiendo uniformes y equipos nuevos y de un grupo de mil 150 y pertenecientes a un cuerpo que tiene 35 mil efectivos.

 

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