La causa es descriptivamente simple y hasta natural, fueron esos inmigrantes -todos gente de bien y trabajadores- quienes se adaptaron y asumieron la cultura dominicana, los que en Haití denominan despectivamente “dominiquein” y quienes ahora y ya dominicanos de sangre y pasión y de pleno derecho, ante la invasión de la parte ignorante del pueblo vecino, los haitianos marginales de sus ciudades básicamente y que es el amplio grupo que constituye la nueva inmigración haitiana hacia República Dominicana, muestran los descendientes de los registrados en el 1920, una firme reacción de rechazo a eso recién llegados, todos indocumentados.
Generándose la situación, de que de golpe, los dominicanos nos encontramos con una actitud, conducta y comportamiento totalmente anti dominicano y de parte de extranjeros provenientes del país transfronterizo, que vienen con el temperamento de tierra arrasada y de sustituir y con el vientre como arma, la población dominicana y hasta hacer suya esta nación vecina, que por desinformación y odio, entienden que les fuera «robada» a sus ancestros.
Toda esa marginalidad migratoria ha sido formada en el odio anti dominicano inculcado por inmigrantes haitianos en EEUU y Europa y específicamente en Bélgica, desde la universidad de Lovaina y en su parte conocida como KU Leuven, que es una universidad católica caracterizada con programas de estudios desde ciencias humanas y teología hasta ciencias aplicadas e ingeniería y la que en los últimos 40 años ha sido la especie de alma mater de los haitianos de clase media y responsable de haber inculcado el odio a sus compatriotas contra República Dominicana y en base a la distorsión subsiguiente de la realidad histórica.
Por ejemplo, los profesionales liberales haitianos formados allí, se gradúan y teniendo el criterio deformado, de que la palabra Haití aplicada a la isla entre los otros nombres de esta como Quisqueya, es el nombre de quienes viven en las dos Repúblicas y que supuestamente, los dominicanos les robamos “la isla completa”.
Y para nada admiten, que fue para el 1600 que los primeros negros africanos esclavos, el origen del pueblo haitiano actual, quienes llegaron a la parte occidental de la isla, mientras en su parte oriental estaban los descendientes de los ibéricos de habla castellana, quienes la habitaban al completo desde el mismo inicio del año posterior al primer viaje del gran almirante de la mar oceana, 1493 y hasta que España entregó a Francia la parte oriental.
Es decir, hacía 107 años que habían nacido los primeros “criollos”, hijos de los colonizadores de raza blanca y la mayoría descendientes de judíos sefarditas (judíos descendientes de aquellos expulsados de la Península Ibérica, España y Portugal actuales) en 1492 y quienes mantuvieron su cultura judeoespañola o, ladino y manteniendo un fuerte vínculo cultural con la antigua Sefarad (España) y como producto de las relaciones sexuales entre colonizadores y mujeres aborígenes, todas mestizas. Lo que significa, que es a partir del 1600 que en la parte occidental de la isla se presentan los primeros asentamientos de negros esclavos africanos y quienes con el correr del tiempo fueron liberados por sus amos franceses. Y quienes al final se independizaron y constituyéndose en 1801 como la primera república negra en el Continente, en tanto la parte oriental se independizó del reino español el 21 de diciembre de 1821 y con el primer nombre, de Estado Independiente de Haití Español.
Sin embargo, ese hecho histórico irrefutable, los haitianos de clase media educados en Lovaina, para nada los reconocen y es a partir de ellos, que el resto de la población haitiana y sobre todo con más criterio distorsionado desde su generación Z, porfiadamente, insisten en cuanto a que la isla es Haití y que República Dominicana está compuesta por un pueblo supuestamente “invasor” al que hay que destruir.
Mientras pensamiento tan poco realista se ha posicionado de la mentalidad haitiana, los dominicanos en cambio y de irresponsables y también por cobardes, preferimos hacernos los desatendidos y ahora que tenemos ilegalmente más de un millón de haitianos indocumentados, es que venimos a darnos cuenta de que todos esos inmigrantes ilegales son nuestros verdaderos enemigos y quienes vienen o ya están con el objeto de destruir a nuestra nación.
Ya no es un asunto de negro o blanco, mulato o mestizo, sino de racismo haitiano puro contra lo dominicano, que debió de haber sido enfrentado desde el momento que desde el 1978 con la llegada del PRD al poder, esa mentalidad de haitianos anti dominicanos fue incentivada por los mismos dominicanos, particularmente inmigrantes en EEUU (Nueva York) e influenciados por oenegés anti dominicanas financiadas por el PNUD y como no se ha hecho nada y ahora agravado con la política propia de la agenda 2030 de la ONU, toda esa que ha sido impulsada y con miras de la desaparición paulatina de nuestra nación y mediante la haitianización total de la vida dominicana y la que desde el 2020, el presidente Abinader (dominicano de tercera generación y de origen árabe y haitiano) la ha estado llevando al pie de la letra.
Todo ha ocurrido, mientras Abinader se ha decidido por contribuir en destruir el alma nacional, sin embargo y para nuestra sorpresa, comenzamos a descubrir a haitianos residentes en nuestro país desde inicios de 1966 (ahora tienen 59 años viviendo en el territorio nacional y la mayoría de sus descendientes dominicanos) y otros más recientes desde el 2000, quienes tienen 25 años en nuestra nación e integrados a la vida dominicana y ya la mayoría sintiéndose o siendo dominicanos, estos también han comenzado a defender a nuestra nación de la presente invasión de vientre haitiano y al grado, de que en las redes sociales comienzan a presentarse voces de mujeres y hombres haitianos residentes, defendiendo a este país y los que entienden, que malos haitianos quieren destruir la nación que les ha acogido.
Pero gracias a Dios, también ha habido un despertar de la conciencia nacional y por parte de nuevas generaciones de dominicanos y teniendo de punta de lanza, las redes sociales e importantes asociaciones y organizaciones cívicas y dominicanistas y sin lugar a dudas, desde ese periodismo ciudadano que ha marcado en tema tan crucial, grandes diferencias con relación a ese periodismo tradicional de cobardes y siendo la especie de trapiche por el que los verdaderos dominicanos y ciudadanos que amamos nuestra nación y siendo parte del despertar social y políticamente, nos hemos dado cuenta, de que, o enfrentamos la invasión de vientre o definitivamente, en los próximos veinte años perderemos nuestra nación.
Debe recordarse, que durante la Era de Trujillo (1930-1961) se estableció la política de dominicanización de la frontera y la otra del gobierno patrocinar los subsidios para que las familias tuvieran muchos hijos y que fue la razón del por qué los dominicanos éramos de raza blanca y su variable mestiza.
Ahora los tiempos en estos 64 años han cambiado y como una fuerte mayoría nacional nunca ha sido racista, se tiene una gran mayoría mulata y con presencia de una negritud menos acentuada que la de Haití, pero la que podría variar, si el Estado y cual que fuere el gobierno, se decidiera por incentivar el nacimiento de más dominicanos y como la vía correcta y para asegurarnos, de que para el 2075, los dominicanos hayamos podido enfrentar con éxito la invasión de vientre.
Desde luego, no es que se va a conseguir del todo, pero seguro que seríamos más gananciosos en materia de proteger el alma nacional y su cultura, que el fracaso que ha tenido Europa permitiendo su invasión africana de seguidores del Islam y quienes ya mismo están logrando con su invasión de vientre y en menos de 30 años, que Europa haya dejado de ser el conjunto de naciones en las que descansaba la civilización occidental.
Ante tal panorama la pregunta que hacemos es más que válida y su respuesta también: ¿Destino Dominicano?: Hace 105 años, 30 mil haitianos, que eran y fueron registrados como residentes legales en el primer censo de población y familia de 1920, son ahora sus descendientes, los más furibundos anti haitianos. Con Dios. (DAG) 29.12.2025
Ultima actualización: 04:11 pm.
Imagen: Generalísimo Trujillo y el presidente Francois Duvalier





