Desde que se anunció la “automatización y ampliación de los carriles de paso rápido” en el peaje de las Américas, aportamos nuestro análisis sobre las inconveniencias que esto podría traer.
Habíamos observado y dado seguimiento a como durante varias semanas antes de su inicio, se habían producido una cantidad de publicaciones en los medios de la prensa escrita y digital, pareciendo como si el tema del peaje fuera el fundamental a resolver para salvar la soberanía nacional o resolver el tema de salud, educación, seguridad o endeudamiento.
Nos preguntábamos que será lo que se busca con el tanto publicar sobre RD Vial, su fideicomiso y el peaje las Américas. Finalmente se develo el interés y se habló claramente que se iban a dedicar un número mucho mayor de carriles al paso rápido y mientras tanto algunos periódicos denunciaban que en la última semana previa al inicio del “nuevo servicio”, se habían producido las aglomeraciones de vehículos.
Parecería que por no tenerse más filas de paso rápido se estaban produciendo aglomeraciones y tapones al llegar al peaje, cosa que no podía ser cierta a nuestro entender, porque, porque la gran mayoría de los usuarios de la autopista las Américas usan el peaje con pago en efectivo.
Cuando nos acercamos algo más al tema llegamos a entender que se estaría favoreciendo a los que ya eran “clientes del fideicomisario”, más que “usuarios del peaje y la autopista”, pues, estos si se pudieran ver afectados cuando “todo el mundo y con todo el derecho legal” usa cualquier carril del peaje a conveniencia de su interés de destino.
El hecho de dedicar una gran parte de carriles al paso rápido no es un inconveniente, siempre y cuando también se atiendan a los que pasan pagando en efectivo. Sin privilegiar a nadie, pues la autopista es un BIEN PÚBLICO no es propiedad de un FIDEICOMISARIO ni puede serlo.
Anteriormente había menos carriles de paso rápido y los pueden poner todos de paso rápido y así, el que compre el paso rápido entra a cualquier carril y pasa rápidamente, pero el que va a pagar en efectivo también. Y está en todos sus derechos. Pero no es la idea de la nueva diablura irritante en contra de los intereses de la mayoría, pero en provecho de quienes se benefician del Fideicomiso.
La idea ha sido de acuerdo a lo que vimos hoy en la prensa, ampliar aún más con carriles de paso rápido, y que la gente compre pagando por adelantado varios pasos por el peaje, aunque pase una sola vez, e incluso dotar al peaje de la seguridad NO PARA EL USUARIO, NO, para el FIDEICOMISARIO, con agentes de DIGESETT asignados de forma tal que si alguien usa o intenta usar de manera impropia el carril de paso rápido, este sea FISCALIZADO.
Un abuso irritante y una violación al derecho que tenemos los dominicanos de ser tratados con igualdad por las autoridades.
Ya habíamos analizado el tema y adelantábamos que en cualquier momento se podrían producir protestas y rebeliones de personas que se encuentren con una gran fila en el paso que no es rápido y no puedan pasar por el paso rápido, aunque no se tengan usuarios en ese momento.
El pago por adelantado solo tiene sentido, si el usuario puede pagar por los días que elija, es decir, si decide comprar un solo día, sea el pago de los 60 pesos sin problemas. La idea de un peaje es que el usuario pague esa contribución cada vez que pasa, no pasos a futuro pagos por adelantado. Y en dado caso de que esto sea una alternativa (NO UNA OPCIÓN), sea por voluntad propia y con garantía de NO VENCIMIENTO AL MENOS POR SEIS (6) MESES DE SU COMPRA.
Otro elemento que puede traer conflictos y momentos de verdad no deseados es que por algún momento la estafeta de peaje no tenga acceso a internet o a la tecnología para que el usuario pueda pasar rápido. O que cuando el usuario compre esa información no sea reconocida por el dispositivo de lectura que tenga la estafeta.
Es decir que, tanto por un vencimiento no conocido por el usuario, como por una falta de reconocimiento por la estafeta, se podrían producir aglomeraciones (por razones tecnológicas), en los pasos rápidos.
En cualquier caso, creo que la mejor alternativa sería que todos los carriles tengan el paso rápido y al mismo tiempo tengan la opción de pago en efectivo y de forma contraria: que la gran mayoría de carriles (el 80%) al menos sean para el pago en efectivo y solo se dejen exclusivos el 20% de los carriles para el paso rápido.
Creo que no existen dudas de que la gran mayoría de personas que utilizan el peaje de las Américas pagan en efectivo y no tienen una frecuencia tan alta de viajes. Se puede querer motivar a las personas para dar mayor agilidad promoviendo el uso masivo del paso rápido, pero JAMÁS imponiéndoles si no lo desea o haciéndoles pasar malos ratos en filas largas en los pocos peajes que se puedan dejar fuera del paso rápido.
Lo que se ha hecho ha sido FORZAR por conveniencia del FIDEICOMISARIO (no pensando en el usuario, se sabe que no importa), sino sumando la mayor cantidad de carriles, pues el pago por adelantado asegura un pago de varios pasos, un manejo de más dinero, y una altísima posibilidad de que el usuario pierda o deje perder el dinero por este ABUSO DEL CAMBIO, esta vez en materia de Seguridad Vial. Por: Julián Padilla [Listín Diario]
