Haydee Domínguez han aumentado casos ansiedad; el abuso infantil es un tema serio

SANTIAGO.- Haydee Domínguez, psicóloga clínica y terapeuta sexual y de pareja, entiende que como experta en asuntos de medición y orientación, su labor ha sido muy demandante, ya que se debe mantener la armonía en los acuerdos terapéuticos, entre otros asuntos importantes.

Domínguez afirmó que aspirar a tener salud mental no es un tema que se resuelva con un certificado; la inteligencia emocional es un camino que nunca acaba y siempre requiere crecimiento, mejora continua y autoconocimiento.

La experta aseguró que el mundo es cada vez más competitivo y que aquellos que no tienen una mente bien amueblada a nivel de salud mental no prosperan en ningún aspecto; quizás lo logren, pero enfrentando muchas trabas.

La doctora reiteró que existe un aumento significativo de casos de ansiedad. Antes de la pandemia, la Organización Mundial de la Salud (OMS) proyectaba que para este año las enfermedades de salud mental estarían en primer nivel, cuando siempre estuvieron las cardiovasculares.

“Tenemos mucho por hacer. La ansiedad está en niveles alarmantes en adolescentes, adultos y adultos mayores, y la depresión ni se diga. Lo que pasa es que no existe una prevención, no hay campañas, y el presupuesto es vergonzoso, es menos de un uno por ciento”, dijo la doctora.

La especialista manifestó que cada diagnóstico médico tiene que involucrar la mente. Los doctores deben concientizar y referir a psicología clínica, psiquiatría y otras áreas. Además, la psicóloga recomendó que también los familiares deben ser referidos a los especialistas de la conducta.

De igual manera, dijo que la ansiedad afecta a las relaciones, las lacera, ya que se caen expectativas de la otra persona y se desconoce cómo debe manejarse la situación; los temas de pareja se pueden ver como juegos.

En cuanto a otro tema, la doctora se refirió a los abusos sexuales como un asunto serio, cometidos por personas con problemas de personalidad muy profundos. Quienes se erotizan con un niño no deben ser tomados a la ligera, por lo que entiende que no existe la necesidad de que un niño de 14 años cuente con el permiso para sostener relaciones sexuales consentidas, principalmente por las enfermedades de transmisión sexual.