InicioPor el Ojo de la CerraduraMás del cincuenta por ciento del equipo de armamento militar ya es...

Más del cincuenta por ciento del equipo de armamento militar ya es obsoleto y del que pasa cinco años, prácticamente la totalidad y lo mismo abarca a la policía y mecanismos de inteligencia y data

Si Abinader no fuera a veces una persona terca y casi irracional cuando se lo propone, tal vez pudiera entender lo imperativo de pasarle auditoría a todo el equipo y armamento militar de nuestras fuerzas armadas, sobre todo las adquiridas en los últimos cinco años, más una revisión exhaustiva de sus recursos humanos y que le urge.

Si lo hiciera y no de manos de auditores criollos y sí forenses del exterior y sin importar nacionalidad, podría también encontrar la oportunidad de deshacerse de lo que con el avance de la tecnología ya no es útil y a partir de ahí transformar las instituciones militares y policiales y mejor si le agrega el esquema de rediseñar el tipo de recursos humanos, que para estos tiempos esas instituciones requieren.

Sin embargo, es difícil que el mandatario quisiera dar su brazo a torcer y mucho menos con relación al individuo no dominicano y ejecutivo de una corporación internacional de origen haitiano-estadounidense que es parte de su gobierno y como alto cargo en el Palacio Nacional y a cargo de la compra y venta de armamentos y quien, no precisamente por mala fe, sino porque sus prioridades como no dominicano le pautan otras, parecería que no tiene un sentido correcto de lo que en armamento le conviene a este país.

Desde luego, si recordamos lo que eran todas esas instituciones tutelares al 30 de mayo de 1961, encontraríamos una Marina de Guerra con destroyers y equipo pesado de mar, fragatas y corbetas y con efectivos cercanos a cinco mil personas perfectamente entrenadas, tanto para el accionar de defensa como para el accionar civil y todos auténticos marinos profesionales.

Ni hablar de la Fuerza Aérea, que en sí era un ejército completo de 15 mil efectivos y con un armamento envidiable y una altísima capacidad profesional entre todos sus oficiales y suboficiales.

Y terminando el recuento con el ejército de tierra, el Nacional, que se supone tiene cerca 50 mil efectivos y nada de fuerzas especiales y aun así, la joya de la corona en materia de calidad y excelencia militar en lo relativo a recursos humanos y de armamento.

De la policía, la efectividad de su cerca 10 mil efectivos radicaban en la preparación de su personal de investigación y en su operativo de campo y todas estas ramas castrenses, con el punto común de las altísimas academias militares de las que se nutrían sus operativos y fuerzas especiales.

Hoy y a 64 años, todo se lo ha llevado el viento, la incuria de los políticos, la sinvergüencería de la clase gobernante y la alta traición de jefes militares después de muerto Trujillo, que accedieron en todo para que los servicios tecnológicos militares fueran desaparecidos, así como la extraordinaria fábrica de armas, con su arma emblemática, la ametralladora San Cristóbal y que fuera el mismo derrotero al que le siguió la fábrica de pólvora.

El desbarajuste ha sido tal, que si hoy se logra obtener quince mil hombres adecuados para ser entrenados como fuerzas especiales para frontera y mar y sacando de raíz el personal femenino, de una policía a la que los jefes y para no insultar, poco que menos las tienen de sirvientas. Entonces se podría reestructurar las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional para que fueren las instituciones castrenses que la seguridad nacional requiere para los próximos cincuenta años… y no solo las de desfiles y de máscaras de hoy.

Basta decir que la mayoría de nuestros castrenses tienen espíritu de tránsfugas y mercenarios, pero sobre todo sicarios, que tanto le sirven a las instituciones, al gobierno como a los empresarios y hasta directores de medios de comunicación y uno que otro periodista y ahora lo nuevo del Dicrim convertido en la tropa de seguridad de “tiros a mansalva” que responde a civiles que controlan el fideicomiso policial con el que y legalmente, el empresariado del CONEP y COMPETITIVIDAD ha reconvertido el cuerpo policial en lo más parecido a una policía privada y teniendo directamente a su servicio no menos de 15 mil efectivos ….y que es la razón del porqué de la nueva ola de criminalidad de uniforme y asesinando por doquier y en particular, a jóvenes en los barrios de nuestras ciudades y en paralelo, afectando la libertad de tránsito de todos los ciudadanos.

Entonces y mientras las fuerzas Armadas y la Policía en otros países y sus organismos de seguridad e investigación disponen de las últimas tecnologías y lo más nuevo en armamentos de gran ingenio, como drones militares ligeros y sistemas de armamentos de alta precisión, nuestros militares y policías continúan en lo tradicional: Helicópteros con más de treinta años de uso, aviones y tanques más viejos todavía y armamento ligero de poca confiabilidad y en muchos casos, sin la necesaria cantidad de municiones que se requieren.

Tomemos un ejemplo del desorden que hay: El muro fronterizo y su sistema integrado de vigilancia electrónica y drones, que de tan eficiente, despertó la envidia y el rencor del ministerio de defensa y donde, de tanto dar la gota de agua en la piedra, hizo el hoyo y hasta que se logró que Abinader accediera a desconocer a la empresa contratista que facilitaba el servicio y para entregárselo a manos inexpertas y avariciosas de uniforme y empresas privadas, que por el toyo que hicieron, aquello es ahora un gran hueco por el que tanto hay inmigrantes ilegales….como traficantes de uniforme,  de personas, drogas y de armas y el gobierno, sin data cierta que beneficie la seguridad del Estado.

Hablamos a grandes pinceladas y porque para nada quisiéramos ofender a la minoría de los militares, policías y agentes de seguridad de alta profesionalidad, quienes aun habiendo sido relegados y sus organismos casi desguarnecidos, lo poco que todavía hay de efectividad operativa solo se debe a ellos. ¿El resto?, dominado por el afán de lucro extremo, el enriquecimiento ilícito y con cuanta asociación temeraria de malhechos se pudiera formar, los oficiales «cajotas» (sin preparación académica y sí de tráfico de influencias por política) quisieran para sí.

Como el tema es más que delicado, preferimos mejor, que quienes quieran saber lean en entrelineas y descubran por sí, lo que a nosotros nos ha dejado turulatos. Pero Abinader es terco y no le da la gana de escuchar a nadie que no sea de su entorno o de sus socios haitianos en su gobierno plutocrático y por eso está más que vendido y con los de su círculo íntimo haciéndole ver lo que no es.

Mientras tanto y ahora que ya vino a tomar posición la nueva embajadora estadounidense, experta en alta seguridad del Estado y de quien sabemos que en el último informe que se le dio, ocupó posición destacada el desvertebramiento y desorden de nuestro aparato militar, policial y de seguridad; por lo que presumimos, que después que entregue sus cartas credenciales, en su primer punto en su agenda, tratará todo lo relativo a la alta seguridad del Estado y sus implicaciones geopolíticas, ahora salvaguardadas por efectivos del Comando Sur.

Así pues y a nuestro de ver, la situación que describimos es más que crítica y por lo que enfatizamos, respecto a que más del cincuenta por ciento del equipo de armamento militar ya es obsoleto y del que pasa cinco años, prácticamente la totalidad y lo mismo abarca a la policía y mecanismos de inteligencia y data. Con Dios. (DAG) 31.10.2025

última actualización: 09:28 am.

 

 

 

spot_imgspot_imgspot_imgspot_img
RELATED ARTICLES
spot_imgspot_imgspot_imgspot_img

LAS ÚLTIMAS NOTICIAS DE HOY

El domingo 02 de noviembre es el maratón de Nueva York...

Conocemos del caso de un corredor profesional de maratones y ejecutivo a nivel gerencial del Banco de Reservas, quien correrá este domingo en el...

Mas Populares