Se supone, que al llegar a 64 años de desaparecida la Era de Trujillo y la muestra de formidable empuje de la economía nacional a un nivel macro tan significativo que se ha tenido en este lapso, lo correcto debió de haber sucedido, que ese éxito económico estuviera avalado y garantizado por un formidable desarrollo de los recursos humanos y al punto, de que ahora ya hubiese en universidades y centros tecnológicos de Rusia y China, no menos de mil profesionales dominicanos autocapacitándose en las mejores y mayores innovaciones tecnológicas.
Sin embargo, esto no ha ocurrido y debido a la mentalidad rupestre de los empresarios criollos- una amalgama en la que hay mucho de elemento español y árabe- y de un corte y estructura familiar primaria, que solo ha facilitado que determinadas familias se enriquecieran y sin bases ciertas, para que por lo menos sus negocios y empresas pudieran sobrevivir por tres generaciones.
Al mismo tiempo, ha ocurrido el fenómeno, de que la pléyade de profesionales universitarios que salieron a especializarse en el exterior, al retornar, se encontraron que lo aprendido en las aulas solo les serviría como credencial de respeto y en la medida que asumieran un comportamiento sumiso y moralmente entregado a sus empleadores y que de contrapartida, provoca en la población, es decir, dentro del ciudadano de a pie, una actitud de prostitución social obligada y si cabe el termino y si no quieren verse marginados absolutamente
Para evitar esa marginalidad social, los ciudadanos de a pie y ni hablemos ahora de las nuevas generaciones y estos entre 18 y 36 años, la mayoría e increíblemente, impulsados por los adolescentes que rechazan las aulas al ver que sus mayores son simples esclavos de los dueños de las fuentes de trabajo, se refugian en el nicho de la inversión de valores morales y cuyas particularidades se muestran en los teteos urbanos así como en el consumo indiscriminado de todo tipo de drogas y consentimiento absoluto de la más promiscua prostitución social. Que paradójicamente, da la base para que “los empresarios más agresivos” hubiesen descubierto el nicho del turismo sexual y su secuela de crímenes disfrazados de exceso en el consumo de drogas.
Pero si lo anterior no fuera de escándalo, peor es lo que se observa desde los centros del poder económico y gubernamental y al grado, de que a estos momentos, el territorio nacional está dominado por la corrupción oficial y en todos los poderes públicos, al tiempo que los grupos económicos y financieros y desde el 2020 a la fecha, aprovechando que tienen a uno de los suyos como presidente de la República, han logrado controlar todos los recursos nacionales y a partir del control absoluto que tienen como Consejo Nacional de Competitividad, donde las 48 fortunas mas grandes de la nación y como gobierno oculto, ya controla los recursos de los contribuyentes mediante la aplicación y ejecución del mismo presupuesto nacional.
Es decir, el presidente Luis Abinader ha facilitado e inconstitucionalmente, sus facultades y poderes constitucionales, que se suponen son indelegables, en un conjunto de empresarios, industriales, banqueros, contratistas y suplidores públicos y consorcios extranjeros del área minera, quienes no solo saquean continuamente la riqueza nacional e imponiendo un gobierno plutocrático, cuyo único norte es mantener bajo secuestro la economía, mientras la población vive dentro de la marginalidad y la miseria más significativos y solo permitiéndosele y como vía de escape, que solo se endroguen, se prostituyan y se conviertan en parte del sicariato.
Justo por esta situación, es que este país ha sido convertido en uno dependiente de la economía estadounidense y al extremo, de que su sector financiero y en alianza con los bancos corresponsales estadounidenses, impiden que la economía sea abierta y sí solo una de mercado atrapado que no deja que la riqueza llegue a todos los niveles de la población.
De esta manera y ahora que desde Moscú se ha conocido y como producto de la reciente conferencia del Foro Económico Internacional de San Petersburgo, donde se ha revelado el interés ruso por crear un corredor estratégico entre Yucatán, Cuba y Moscú y en todas las áreas del comercio internacional, por medio de vínculos energéticos, logísticos y comerciales con base en México y desde Yucatán aprovechando la cercanía con EEUU y comenzando con una ruta aérea desde Moscú hacia La Habana y desde esta a Yucatán y que al implementarse, romperá la correlación tradicional de las fuerzas económicas en el área.
Si la economía dominicana estuviera dirigida por tecnócratas de pensamiento y accionar abierto, el empresariado criollo y a la cabeza el Consejo Nacional de Hombres de Empresas (Conep) ya debería de estar implementando planes de expansión y búsqueda de nuevos mercados en el citado foro internacional y en concreto con la economía rusa. Donde y por los datos que conocemos, fue una delegación criolla encabezada por un viceministro, pero sin potestad alguna para decidir.
Y que, de suceder, que hubiese habido libertad de iniciativa, facilitaría las cosas para que esta economía se independizara de la influencia estadounidense y se abriera a nuevos mercados y posibilidades de acercamiento y relaciones, económicas, que eventualmente pudieran llevar a que República Dominicana terminara siendo parte de los países BRICS y como ya lo es Cuba y al tiempo de aumentar sus relaciones comerciales con China Popular y en esta última en una relación más equitativa y productiva a favor de nuestra economía.
Mientras, también hay que mirar con cierto dejo de preocupación, que Venezuela pretenda reabrir la iniciativa Petrocaribe que había cerrado en el 2019 y que conociendo el intento de fusión en lo empresarial de la economía dominicana con la haitiana y cuyo gestor es el magnate haitiano, Gilbert Biggio con intereses en derivados del petróleo, que pudiera entenderse que fuera un aliento a favor de que Haití se beneficiara y a lo cual, el Consejo económico Binacional Quisqueya (CEBQ) debería entender como un factor de preocupación.
Pero nada de esto se piensa o se tiene en cuenta y sí solo en depender de la economía estadounidense, mientras de golpe, ahora hay la posibilidad, de que Cuba, que sería nuestra gran rival económica, pudiera encontrarse a las puertas de una grande inyección de recursos, que en menos de cinco años levantara la economía cubana y haciéndola competitiva y que de suceder y manteniéndose la economía dominicana dentro de los atrasados moldes de mercado atrapado y oligopolio, augura que esta economía sería la más perjudicada.
Lo que hay que advertir y sobre todo, conociéndose que en este país no existe una opinión pública libre, sino que 10 de las 48 fortunas en Competitividad, tienen el control absoluto de los medios de comunicación tradicionales y quienes manejados con un mecanismo de fuerte autocensura, no deja que la gente participe en el debate de las ideas y de políticas y lo que ahora parecería que se está rompiendo con el nacimiento de las redes sociales, donde influenciadores y productores de programas de opinión en You Tube han logrado romper el monopolio de opinión dirigida bajo censura y despertando una nueva clase de opinión libre, que de tan fuerte, ahora Competitividad y Gobierno, amenaza con imponer una ley mordaza que haga desaparecer a esos medios, mientras sus medios tradicionales solo se aferran a señalar que hay que “preservar la ética en la comunicación” y como su freno para bloquear la libre opinión y el derecho a tener acceso a la información libre.
Teniendo en cuenta todos los factores anteriores, es que alertamos, respecto a que las nuevas generaciones y para nada, pueden permitir que, contra ellas, la dictadura plutocrática de 64 años continue y mientras aquí, empresarios dominicanos y haitianos buscan fusionarse y en vez de tener una mentalidad y actitud globalista, en tanto Rusia busca un corredor económico estratégico entre Moscú, La Habana y Yucatán, que frente un EEUU en decadencia, la economía dominicana debería reactualizarse. Con Dios. (DAG) 30.06.2025





