A partir del 1 de junio de 2024, hasta diciembre de 2040, el Estado dominicano soporta una deuda de 917.20 mil millones de pesos DOP, solo en bonos internos del Ministerio de Hacienda.
El compendio está publicado en el Informe de Situación Macroeconómica de la Dirección de Análisis Macroeconómico (DAM), del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (MEPyD), que no incluye otros elementos de la deuda interna, como los bonos de recapitalización del Banco Central de la República Dominicana, los préstamos de bancos locales ni los créditos establecidos con suplidores del Estado.
El compendio del MEPyD presenta lo que República Dominicana tiene que pagar cada año, por concepto de bonos del Ministerio de Hacienda en manos de inversionistas locales como personas físicas, administradoras de fondos de pensiones, empresas locales que invierten su excedente de tesorería y aseguradoras que invierten parte de sus reservas técnicas, entre otros.
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Desde el 1 de junio hasta diciembre de 2024, el país tiene que pagar 14,885 millones de pesos DOP. Para 2025, el país tiene que desembolsar 69,621 millones de pesos DOP. En 2026, se vencen bonos locales de Hacienda por valor 76,021 millones de pesos DOP.
Los bonos internos de Hacienda a vencerse en 2027 alcanzan los 15,575 millones de pesos DOP. Un buen tramo hay que pagarlo en 2028, en ese año electoral se liquidan 124,670 millones de pesos DOP. Mientras que en 2029 terminan 116,736 millones de pesos DOP en bonos.
Siguiendo con e compendio de MEPyD, para 2030 se pagan 39,994 millones de pesos DOP, en 2031 se liquidan 96,442 millones de pesos DOP, y en 2032 terminan su ciclo de deuda 50,445 millones de pesos DOP.
Para 2034, se vencen bonos internos de Hacienda por 192,000 millones de pesos DOP, en 2035 terminan 32,518 millones de pesos DOP y en 2040 se liquidan por 88,295 millones de pesos DOP.
El Ministerio de Hacienda ha planteado en su estrategia de deuda pública que pretende enfocarse en créditos con organismos multilaterales, para disminuir su dependencia prestataria de los bonos. Por Carlos Arturo Guisarre[N Digital].
