¿Cuál es el resultado crudo de las elecciones tramposas de mayo 19?, que a partir del 16 de agosto habrá un nuevo gobierno reeleccionista, producto del coraje de Abinader de no apretársele el pecho en la toma de decisiones y también por la bochornosa huida de la oposición, acosada por sus propias debilidades y atada a ese afán de lucro de sus líderes y por ser parte de la nómina pública “ad vitam”.
Es decir, y por más vueltas que se le quiera dar o mañas para tratar de justificar lo imposible en materia de los errores opositores descomunales que se perpetraron, lo que se observa, es que mientras Abinader y su PRM hicieron todo lo posible -legal o ilegal- para quedarse en el poder, la oposición se durmió con su colorida galería de marchas, desfiles y declaraciones rimbombantes y disputas cerradas entre sus dos lideres principales. Mientras, hubo un tercero, el presidente del PRD, Vargas Maldonado, luchando a brazo partido para que la disputa cesara y se colocara un candidato presidencial unitario para Rescate RD.
Nosotros somos más crudos y específicos: Se volvieron a alquilar. Pues era mejor seguir en el poder a escondidas y con cheques, que asumir responsabilidades gubernativas que siempre dan impopularidad y teniendo como beneficio oculto, seguir como “opositores” y mientras el gobierno carga con las responsabilidades del día a día y el que inteligentemente les deja hacer.
Obsérvese, que, para botar el golpe luego de la vergonzosa derrota, Leonel se desgaritó a una oportuna conferencia en Londres, mientras Danilo enfrenta todavía una tentativa subversiva de parte de “las ratas” que el mismo PRM ya tenía a su favor y ahora, al costo de que el aparato de propaganda oficial le zahiere y como todavía no se había visto y es que en el Palacio Nacional saben, que el peligro para el 2028 está en Danilo y no en el flojo de siempre de Leonel.
¿Por qué decimos esto?, porque ya es hora de que la ciudadanía se dé cuenta de que todo se trata de un pérfido rejuego de la partidocracia y con tal de no perder el control de la vida política nacional. Abinader ganó, porque se arriesgó y se la jugó propiamente y sí, porque la Oposición y con la excepción de Danilo, se le entregó de pleno.
Ahora estamos ante la nueva realidad: Abinader gana e invita a los rivales a discutir lo relativo a la nueva reforma fiscal y de paso, con su porfiado interés de hacer una reforma constitucional, que tal como la tiene diseñada, va en procura y aunque diga mil veces que no va, para continuar en el poder.
¿Dónde corre todo a su favor?, que como la Oposición no aceptó su invitación y para colmos y en vez de tomarle la palabra, le dice que es mentira, que él va, Abinader tiene ahora el camino libre para una y otra reforma y al no tener interlocutores opositores que le obligaran a razonar y frenarse y que de esto es de que se trata: Abinader propone, la Oposición rechaza, pero como Abinader tiene el poder y el presupuesto, más su legión de medios y comunicadores sicarios con los que adormece a la atrapada opinión pública, al final, el presidente hará lo que quiera y sus “opositores” seguirán cobrando debajo de la mesa.
Sin embargo, podría suceder, que Danilo, que es el expresidente y político más vilipendiado en las redes sociales pro-gobierno, dé un golpe de bastón y públicamente acceda a lo que quiere Abinader, que la oposición le legitime con su sola presencia en la reunión sobre sus dos proyectos de reformas y con cuyo accionar y provocado por Danilo, a Abinader se le saltaría el tablero que ya tiene diseñado.
Y lo que debe puntualizarse y traerse a discusión y dadas las experiencias que sobre este particular se tienen y desde el llamado Acuerdo de Santiago, cuando la Oposición se retiró de las elecciones de 1974, provocando que Balaguer las ganara como bien quiso.
Exactamente, lo mismo pasará ahora con la absurda negativa y rechazo de invitación a participar en las dos reformas, que como la Oposición no estará presente, Abinader y su PRM harán lo que les vaya en ganas y al quedar el gobierno solo en la cancha, ambas reformas serán un compendio de autoría propia.
Entonces y desde el punto de vista de los intereses permanentes de la nación, lo correcto debería de ser y desde luego, lo político, que la Oposición no rechace nada y partícipe en la discusión sobre las dos reformas y cada opositor dejando su ego a un lado y por la decisiva razón, de que Abinader se quedó con el poder -a las buenas o a las malas- se quedó y él por lo tanto y si lo dejan solo, podrá hacer lo que le venga en ganas a mayor amplitud y lo que no es bueno para la institucionalidad.
Leonel Fernández y desde que siendo adolescente regresó al país y haciéndolo con la etiqueta de dominicanyork con residencia en EEUU, lo primero que hizo y de oportunista, fue meterse entre sus vecinos del barrio popular de Villa Juana y como hablaba bonito y lo que luego perfeccionó cuando entró al circulo de Bosch en donde su acento lo reconstruyó muy a lo cubano y para de ese modo adaptarse a los requerimientos de su líder, se caracterizó por nunca proponer nada y siempre calladito, esperar la decisión del líder y de la mayoría y a la que entonces se plegaba humildemente. De esa manera escaló posiciones.
Una mañana llegó con unos tenis de marca ante sus compinches de barrio y todos vieron, que nuevecitos, los metió en un charco de agua y lodo y al hacerlo, le preguntaron que porque lo había hecho y respondiendo: “para que así la gente vea que no soy de fuera y sí del barrio”.
Otro día y ya en el comité político que elegiría entre todos el que sería el candidato presidencial para el 1996, cuando Danilo Medina lo propuso, dijo rápidamente y con mucha humildad, algo así, como “no, no, no, yo no, busquen a otro mejor que yo”, aun así, Danilo lo señaló y el colectivo lo designó. ¿Porqué? por el razonamiento de Danilo: “Tú vienes de candidato vicepresidencial, eres el más conocido”. Recuérdese, que Danilo era a ese momento diputado señalado del PLD.
Se va a la campaña y cuando todos los indicadores daban, que Leonel ganaría las elecciones, una tarde y en otra reunión del comité político: A Leonel se le acerca el profesor Euclides Gutiérrez Félix, muy respetado por todos y el que le dice: “y mira, como quien no quiere la cosa, vas a terminar ganando la presidencia” y Leonel, ni siquiera ahí admitió lo que se le decía y quedamente solo sonrió a medias.
Se llega al poder y la primera mañana y ya en el despacho presidencial, Danilo entra y Leonel le pregunta: “Y ahora que hacemos?” y el entonces ministro de la presidencia y actuando como el gobernante de facto, le dijo: “No te preocupes, déjamelo a mi”…Ese es el tres veces expresidente Leonel Fernández y gracias al aparato del PLD y el que ahora y escurridizo como siempre, se atreve a tener la fantasía de que podría repetir como candidato presidencial en el 2028 y olvidando, que una nueva generación y con su hijo al frente, ya ha empezado a tener dominio de la FP.
¿Cuál nuestra autoridad para relatar esto? E independientemente de que somos el único analista político de Estado con 52 años de quehacer continuo y escribiendo todos los días desde POR EL OJO DE LA CERRADURA como editor-director y redactor jefe, está lo otro, que somos el único periodista con el que directamente Juan Bosch y desde Vanguardia del Pueblo, pretendía refutar todo lo que expresáramos sobre aquel PLD, que para la época, era como una especie de logia privada y lo que Bosch hacía desde la columna que expresamente creara con el sugerente título de: “Aldeano Gómez”.
Para los años 1972-1978, fuimos lo más parecido a ser el principal analista político de que aquellos años y seguidor del presidente Joaquín Balaguer, quien fue el que nos sugirió que hiciéramos esta columna: “búscale nombre y entonces sabré si me he equivocado o no contigo”, dijo. Y lo que no impidió que fuéramos el critico más duro de la corrupción del PRSC, mientras el resto de la prensa callaba y asentía. Un detalle: Por dos años nos expulsó de Palacio, donde DAG lo tenía como fuente principal y luego, el ataque rastrero del periódico El Siglo, recopilando durante siete días, cinco páginas diarias reproduciendo fuera de contexto esta columna de análisis político independiente con todas aquellas en las que atacábamos la corrupción gubernamental y es que nunca nos alquilamos a ningún sector y menos a Balaguer.
Ultimo detalle: Nos llama un día el ahora fallecido Franklin Almeyda Rancier -hombre de confianza de Bosch- y nos solicita que “el profesor quiere conversar contigo en mi casa y con la presencia del comité político”, no preguntamos de que se trataba y tampoco consultamos a nadie. Accedimos y allí nos encontramos con este cuadro surrealista: El comité en pleno como tal y Franklin, llamando a Bosch por teléfono y aquel hablando a través de este. Se pretendía ver si era posible que fuéramos parte de aquel entorno. Por lo menos eso entendimos. No se llegó a nada y al salir, un militar de Palacio nos aguardaba en la planta baja del edificio donde vivía Franklin y con este mensaje críptico: “Dice el presidente que vaya a verle y ahora”.
Balaguer solo quería saber una cosa, de si habíamos accedido a lo que Bosch quería y respondiéndole que no. “Menos mal, porque esa es una zoquetada de Juan y para ver si me afectaba”. ¿Tuvimos suerte?, no, sagacidad, intrepidez y limpieza de conducta personal y profesional y, aun así, hasta atentados hubo. Con todo y si tuviéramos que volver al pasado, la misma conducta sería repetida. Nuestra independencia de criterio es tal, que nunca se nos ha distinguido con diplomas, condecoraciones, homenajes o designaciones y siempre solos y con Dios.
Presentadas entonces las credenciales anteriores, creemos que se entiende por qué decimos, que, si no ocurre algún imprevisto, la reelección continuará y tonta la Oposición que se le invita a negociar y rehúsa.
En definitiva, ya Abinader logró su reelección en el 2028 y su reforma fiscal y la otra constitucional, ahora y gracias a la cobardía opositora. Más un compendio de memoria personal. Con Dios. (DAG) 12.06.2024





