domingo, agosto 4, 2024
InicioPor el Ojo de la CerraduraAsumamos que sí, que no buscará su reelección en el 2028. ¿Pero...

Asumamos que sí, que no buscará su reelección en el 2028. ¿Pero haría lo mismo con la partidaria y en esas circunstancias, se podría creer en Abinader? Mientras, Félix Bautista es el enigma

Tajantemente la respuesta es negativa y por la determinante razón, de que el presidente de la República en funciones y electo para el nuevo periodo 2024-2028, demuestra que tiene un solo empeño: Ser el caudillo para el resto de este siglo y lo que significa, que como tiene a la vista un futuro de 30 años, no ve la razón práctica para desistir de esa aspiración y mucho menos, cuando los expresidentes vivos, tienen un límite de vigencia pública de menos de veinte años.

Si nos atenemos a esta realidad y viéndose que quienes podrían ser prospectos presidenciales, fluctúan entre 35 a 45 años y los que Abinader hasta podría turnar en el poder, por lo menos hasta agotar el ciclo gubernativo de los próximos cuatro periodos presidenciales desde el 2028 al 2040, no cabe duda que perfectamente podría alejarse de manera formal de la presidencia de la República, pero no así de la jefatura del Estado de facto y máxime, cuando dijo que él no irá a la reelección y porque solo quiere ser algo así como el protector de la nación.

Por consiguiente, tómese en cuenta, que para este periodo de su reelección constitucional del cuatrienio 2024-2028, Abinader está dando muestras específicas de pretender apoyarse en un electorado nuevo que no pase de los treinta y cinco años y que proveniente de la población electoral de la periferia del Gran Santo Domingo en el mayor de los casos, le daría razón y fundamento para gobernar teniendo muy en cuenta a los jóvenes en las redes sociales, en donde por lo que se ve, tiene sus perspectivas de nuevo gobierno, atadas y bien atadas.

Sí es cierto, que de lo que muchos todavía creen que hay de “oposición”, el senador electo Omar Fernández de la FP, (33 años) este podría evolucionar lo suficiente, pero para ser un prospecto presidencial confiable y de cara al 2032 y esto así, si se observa que el joven e inexperto senador, tendrá que lidiar con otros parámetros extremadamente distintos a los que conoció como diputado de dedo con gran influencia paterna.

También con la realidad del gallo tapado que tienen sectores del  PLD y la FP, el veterano y popular senador Félix Bautista, quien en el 2028 tendría 65 años y a quien solo los torpes podrían darse el lujo de subestimar.

Agréguese el factor, de que quienes de edades comprendidas entre los 18, 22 y 26 y 30 años, a Omar pudieran significarle su base política más segura, desde ya tiene en contra, que un Abinader de 57 años y en el ejercicio del poder, tiene todo el tiempo del mundo para lograr ganarse para sí a la mayoría de esos votantes jóvenes y que no es una perspectiva favorable que podrían tener y si se diera el caso, los expresidentes Danilo Medina ( 77) y Leonel Fernández ( 74)  y menos, un Hipólito Mejía con 87 años y si aun viva de cara al 2028.

De tenerse bien en cuenta esta realidad objetiva, sin duda que la diferencia de treinta años que marcan la gran disparidad entre Abinader y Mejía es el otro factor que determina el por qué decimos, que Abinader tiene tiempo suficiente y naturalmente, si no se presenta una situación radical y sorpresiva en contra y para convertirse en el nuevo caudillo de lo que resta de este siglo.

Por lo tanto, no es asunto de adivinar y sí de analizar exhaustivamente los ponderables e imponderables que se presenten. Tomemos uno de los primeros: A este momento, Abinader es el factor político determinante dentro de no menos tres millones de personas jóvenes y fanáticas de las redes sociales e identificadas plenamente con los lupanares mediáticos en todas ellas y cuyos influenciadores, podrían ser y más que en las elecciones recién pasadas, el puntal decisivo para un nuevo tipo de gobierno, en el que la juventud tenga un peso singular y también trascendente.

De esta manera y sí Abinader se afianza en este sector de electores jóvenes de pura gleba social desde el pueblo bajo, de conducta atropellante y actitud anárquica y teniendo en sus manos los instrumentos y recursos del poder, ¿realmente podría suponerse, que con 37 años en el 2028, Omar Fernández fuera un aspirante tan provocativo, que le pudiera desafiar al candidato presidencial que Abinader presentara como suyo y si es que al final, las circunstancias determinen que el presidente cumpla su palabra de no concurrir a una nueva reelección?

Desde ahora lo decimos y tajantemente, no podría.

Imaginémonos por un segundo, que para el 2028, el presidente cuenta con un cuadro de no menos seis potenciales precandidatos presidenciales de 48 a 52 años y quienes en el presente lapso y sin conocer que podrían ser señalados, cada uno se hace del prestigio y ponderación de una nación joven, que para el 2026 se habrá acostumbrado a que el poder se encuentre solo en manos de ciudadanos jóvenes de 38 a 42 años, ¿por dónde podría colarse el senador Fernández?

Entonces y si la biología nos da la razón, necesariamente que habría que entender, que el nuevo factor político generacional, ciertamente que podría ser dirigido, orientado y guiado, por un Abinader y cómo un caudillo ya en ciernes y para un pueblo conservador y de oportunistas a lo absoluto.

Se podrá estar o no de acuerdo con nuestra apreciación, pero esta realidad de nuevos lideres a granel compitiendo fieramente contra un senador Fernández de 37 años, pero sin poder institucional efectivo, hace difícil suponer un giro que pudiera darle visibilidad y para que, en el 2028, el senador hijo de un expresidente de tanta influencia y prestigio pudiera darle un golpe de bastón a las pretensiones caudillistas de un Abinader que desde ahora arrancó con buen paso.

Además, tómese en cuenta el factor estratégico, de ese periodismo comercializado y compuesto también por jóvenes, quienes a la primera “picá de ojo” y cañonazos de papeletas y como ahora, dejarán de ser objetivos y nada profesionales y sí agentes políticos al mejor postor y en lo que sin duda, Abinader y su PRM se llevan la palma.

¿Se entiende porqué decimos, que asumamos que sí, que no buscara su reelección en el 2028, pero ¿haría lo mismo con la partidaria y en esas circunstancias, se podría creer en Abinader? Mientras, Félix Bautista es el enigma.  Con Dios. 04.08.2024

 

 

 

 

RELATED ARTICLES
spot_imgspot_imgspot_imgspot_img

LAS ÚLTIMAS NOTICIAS DE HOY

Los mítines de Harris y Trump en el mismo estadio de Atlanta muestran las profundas divisiones de Estados Unidos

Los mítines de Harris y Trump en el mismo estadio de...

0
Dos manifestaciones. Dos Estados Unidos. La vicepresidenta Kamala Harris y el expresidente Donald Trump estuvieron en el mismo estadio con cuatro días de diferencia, cada...

Mas Populares