Cada día aumenta la alternativa de un incremento de la guerra Rusia-Ucrania a una abierta entre EEUU, Reino Unido, la Unión Europea y Alemania contra Rusia

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Desde el momento que el ocho de octubre de este año se produjo el ataque de Ucrania contra Rusia al intentar derrumbar el puente que une Crimea y Rusia, desde ese mismo día, Ucrania cambiaba el giro de una guerra de desgaste “normal “, hacia otra absurda y suicida de destrucción de infraestructuras a gran escala y por la que el país eslavo europeo llevaría la mayor parte.

Los hechos conocidos ya lo testimonian, el país ha quedado prácticamente a oscuras y sin seguro abastecimiento de agua y servicios, en tanto a la desesperada, el gobierno títere estadounidense en Kiev, acelera aun más la autodestrucción de su país, incrementando la guerra y por disponer ahora de un mayor apoyo en armamento militar de todo Occidente.

Lo que se persigue obviamente, no es que en la matazón, Ucrania continue aportando los muertos, sino que EEUU y en su lucha por la supremacía global, logre desarticular la potencialidad económica y armamentista de la Federación de Rusia y sin importarle en lo absoluto que país o que países europeos pudieran ser reducidos a cenizas, aparte de imponer a Ucrania v como un virtual estado vasallo suyo dentro de las mismas característica de un nación que se subroga al poder de otra e imperial de característica global.

Por lo tanto, la guerra como tal va a afectar al resto de la humanidad y en la medida que la falta de sentido común por un lado y los ímpetus guerreristas por el otro, empujen a todas las naciones a tomar partido y de acuerdo con sus propios intereses o visión global de como tratar de salir indemne de la conflagración.

Y lo que ahora se nota con gran expectativa, ante las iniciativas alemanas de pretender entrar directamente en la guerra y las otras nuevas, de la alianza tripartita entre Polonia, Lituania y Bélgica procurando que la OTAN apruebe el ingreso expedito de Ucrania y lo que de materializarse sería una declaración de guerra en toda regla y en la que no habría marcha atrás.

Ni que decir, que, en la situación actual, las demás naciones del planeta no cuentan para nada, salvo China y que, llegado el momento de la intensificación global del conflicto, todos esos países quedarían anulados en capacidad de respuesta militar o diplomática y viéndose arrastrados a una situación de critica supervivencia que no beneficiaría absolutamente a nadie.

A todo este desastre, ¿en qué plano quedarían naciones como República Dominicana y sus iguales latinoamericanas y mucho más la caribeña, que quedará expuesta  a una peligrosa situación de arrastre y derivada del hecho, de que EEUU, temeroso de que los submarinos nucleares rusos pudieran posesionarse abiertamente en el área caribeña central y mucho más, cuando se conoce que el país títere de las dos potencias globales fuera de este continente, Cuba y luego del reciente viaje de su presidente a Moscú y Pekín, entrara dentro de lo que parece una alianza secreta geoestratégica para servir de base operativa y para el caso que la guerra EEUU-Rusia se intensificara y lo que para Washington, haría impostergable la ocupación militar del occidente de la isla de la Española.

Si tal escenario probable se presentara, el gobierno dominicano se encontraría en una delicada situación de como hacer que este país experimente los menores daños, sin embargo, nadie en el territorio nacional ha caído en cuenta, que Washington y tanto con sus presiones sobre la migración haitiana y las repatriaciones dominicanas de haitianos indocumentados y lo nuevo, de impulsar sorpresivas sanciones económicas contra una empresa estadounidense y dominicana de características peculiares como lo es el Central Romana, realmente está procurado crear lo que podría ser un movimiento de pinzas, que de alguna manera acorralaría y maniataría el accionar del gobierno dominicano, a la vez que de golpe, realice su cuarta intervención militar en Haití.

No vamos a ampliar nada más sobre estos supuestos que manejamos como discusión de escritorio entre quienes tenemos mentalidad geoestratégica y para ver, si de alguna forma, tanto el presidente Luis Abinader como sus estrategas políticos y militares, buscan las vías para desenredar el serio problema, que, de no estar alertas, se le vendría encima.

De ahí, que entonces los dominicanos tenemos que estar  también muy alertas respecto a lo que está ocurriendo en el terreno bélico allá en Europa y comenzando por indagar, cuáles son las directrices que el representante comercial estadounidense debe de estar haciendo  respecto a los más de 100 ejecutivos empresariales y bancarios de origen dominicano que en silencio son ciudadanos estadounidenses o aquellos otros de origen europeo y quienes llegado el momento, no es verdad que responderán a los intereses dominicanos.

Pero hay algo más y casi siniestro: Que quien entienda que el “inocente” comunicado policial del pasado jueves “carece de importancia” y no obstante que advierte la intensión de  colocarle una mordaza a todo el sector mediático, en cambio, otros lo entendemos, que es un asunto que más parece hechura de la oficina política de la embajada estadounidense, que autoría  de los descerebrados que hay en el ministerio de Interior y la policía y esto así, porque al momento que geopolíticamente EEUU actúe en la isla como en el área geográfica y por los efectos de la guerra que se libra, lo que se pretende, es imponer una política de seguridad bélica frente a todo el aparato mediático dominicano y para que nadie se salga del carril y los servicios electrónicos de espionaje pudieran trabajar a sus anchas.

Abinader, posiblemente no tiene a nadie que le indague sobre este particular o que le interprete, si es factible que tal posibilidad ocurra, pero nosotros le decimos, que el presidente y hablando en criollo, debería de estar “mosca” frente al juego geopolítico de alta estrategia que el incremento radical del panorama bélico presentaría, solo eso y porque de darse, no solo su supervivencia política gubernativa podría quedar en veremos, sino que también debe mirar hacia esos tres expresidentes que nos gastamos, quienes haciéndose lo que nada saben, darían lo que no tienen para darle un vuelco a la situación interna y capitaneada por ellos, salvo si el factor militar no les hace la contraria.

Mientras tanto y en lo que el hacha va y viene, advertimos, que si la pretensión tripartita de los países, Polonia, Lituania y Bélgica de abogar por que la OTAN haga de Ucrania su nuevo miembro, al tiempo que colateralmente, Alemania se apresta a intensificar su participación en la atmosfera bélica, gobiernos como el dominicano, se quedarían sin opciones.

Se entiende entonces este argumento, de que ¿cada día aumenta la alternativa de un incremento de la guerra Rusia-Ucrania, a una abierta entre EEUU, Reino Unido, la Unión Europea y Alemania contra Rusia? (DAG)