Mientras un sector de la prensa perteneciente al barón mediático, Pepín Corripio, quien en días atrás se pronunció a favor de los aprestos electoralistas del expresidente Leonel Fernández, ahora despliega titulares alabando la gestión de Abinader y señalando, que como él no ha habido otro igual y que es una solemne exageración, lo menos que debe decirse, es que Abinader debería revisarse.
Porque no es que alguien no pueda cambiar o modificar su criterio sobre un presidente o político y en atención a la evolución de conducta o procedimientos que este haya hecho, sino que justo a horas del año preelectoral 2023, que endemoniados farsantes de opinión, de esos que siempre han vivido de todos los gobiernos y algunos, hasta funcionarios de aquellos, alaben a quien ayer denostaban con acritud, es un tema que necesariamente pone a muchos a pensar respecto a que es lo que buscan, esos maestros de la intriga, la acechanza, la traición y las canonjías. ¿O será que los nuevos renegados y cambia chaquetas, en silencio, sus antiguos jefes políticos dentro del PLD y para poner un caso, les hubiesen sacado la alfombra de sus pies?
Otros en cambio y que como en por EL OJO DE LA CERRADURA, donde no somos ni cercanos y tampoco adversarios de los políticos y solo sí sus críticos y porque solo defendemos los intereses permanentes de la República, lo único que estamos viendo, es que en la medida que los adversarios y enemigos políticos de Abinader se degradan y en sus sueños de retorno al poder conspiran sibilinamente, el presidente de la República, en cambio, se fortalece y refuerza su imagen de presidente de todos, con éxitos evidentes y con una reelección constitucional, que cada día, gana más adeptos.(DAG-OJO)
