Fideicomisos. No se trata de un asunto de palabras sino de hechos y tampoco de ignorantes

0
141

Nadie objeta la existencia de fideicomisos privados y por la simple razón de que esos entes manejan y son responsables de dineros y bienes privados y por lo tanto, lo que sus administradores hagan en bien o mal es un asunto a dilucidar entre sus juntas directivas y “accionistas” codueños.

Pero cuando se habla de fideicomiso de índole pública, es decir, entes que manejan y controlan dineros públicos y conociéndose como es que los políticos en este país y en gran mayoría se la gastan para malversar fondos públicos, por obligación hay que tener dudas y plantear interrogantes sobre la idoneidad en su funcionabilidad.

Y porque esto se plantee, no se puede calificar a nadie de ignorante y mucho menos pretender que se den criticas contra sus funciones y menos, cuando se conoce que ahora mismo, más de 16 mil millones de pesos han ido a parar a determinados fideicomisos públicos de los que en líneas generales, no se conoce como es que en la práctica se manejan.

Así, que puede que se entiendan las criticas acidas de ciertos organismos y representantes públicos contra quienes critican los fideicomisos públicos, pero si se recuerda que cuando los políticos se meten a administrar bienes y dineros, siempre algo se les queda en las manos y de ahí los tantos procesos que recurrentemente ocurren de imputaciones sobre hechos dolosos calificados de corrupción, que haya que insistir en cuanto a que todos esos entes demuestren fehacientemente en qué gastan los dineros públicos a cargo y por solicitarlo, tampoco sea que se es ignorante y sí todo lo contrario. (DAG-OJO)