Tiempo atrás me mandaron esta información que, al recibirla ahora de nuevo, no me resisto a reproducir porque considero necesario conocerla: El 1 de diciembre de 1993, hace 29 años, un comando español del contingente militar de los Cascos Azules destinado en Bosnia, perteneciente al Tercio «Alejandro Farnesio» de la Legión, en la ciudad de Konjic, a 40 kilómetros de Sarajevo, se encontró con una masacre perpetrada por el grupo musulmán «Pañuelos Verdes», conocidos en toda Bosnia por ser sanguinarios y despiadados. En la guerra de Yugoslavia la prensa solo hacía referencia a las masacres de ortodoxos contra musulmanes, pero la realidad era que ambos bandos fueron igual de crueles e inhumanos, como en todas las contiendas.
El comando militar español, compuesto por 35 legionarios al mando del joven teniente legionario José Luis Monterde Maldonado, escuchó cerca de su posición unos gritos desesperados. Correspondían a unas 200 mujeres y niños que huían de los musulmanes que, al ver los vehículos blindados de la ONU, se refugiaron tras ellos. Mientras, diez soldados croatas que cubrían la retirada de la población civil se rindieron de inmediato ante ellos, e informaron al teniente Monterde que, si no les daban amparo, los degollarían a todos. Al tiempo, los Pañuelos Verdes advirtieron a los españoles que, si no entregaban a los croatas, también los pasarían a cuchillo.