La división del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), en 1985, facilitó el retorno al poder del expresidente Joaquín Balaguer. Hoy, el expresidente Leonel Fernández espera que la división del Partido Revolucionario Moderno (PRM) facilite su retorno al poder. El PRM nació tras la división del PRD en el 2013, y mantiene las mismas pugnas.
Ayer estaban enfrentados Antonio Guzmán, Jacobo Majluta y Salvador Jorge Blanco, hoy lo están Luis Abinader, Ramón Alburquerque y Guido Gómez Mazara.
Ayer Jorge Blanco acusó a Guzmán de utilizar los recursos del Estado para favorecer la candidatura de Majluta. Hoy Alburquerque y Gómez Mazara acusan a Abinader de usar el Estado en favor de su campaña. Lo único nuevo en esta pugna, es la reelección.
Otro elenco, el mismo argumento, la misma obra teatral.
En 1985, interrumpieron el conteo en la convención perredeísta, mataron a un “compañero”, le llamaron el “Concordazo” porque fue en el hotel Dominican Concorde, hoy Dominican Fiesta.
En las recientes primarias neoyorquinas escogiendo los candidatos a diputados de ultramar, el PRM tardó una semana contando seis mil votos. En las primarias del domingo hablan de tres millones, ¿cuánto tiempo les tomará contarlos?
Alburquerque y Gómez Mazara esperan un voto castigo contra Abinader, por “abandonar las bases”. Quizá Abinader militarizó la frontera buscando el apoyo de los perremeístas-patrioteros.
La división del 1985 sacó al grupo del poder, retornaron en el 2000, el fallido intento reeleccionista del expresidente Hipólito Mejía los dividió otra vez. Y ganaron en el 2020 por la división del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
El hombre es el único animal que tropieza dos veces con el mismo obstáculo, sin admitir que está repitiendo sus errores, “la historia se repite”, alega irresponsablemente.
Inventamos la historia para culparla de nuestros errores.
El PRM ¿tropezará “de nuevo, con la misma piedra, y con el mismo pie?”.
Militarizar la frontera elevó la popularidad de Abinader al círculo polar Ártico, cuando retire las tropas, después de las primarias, su popularidad descenderá al círculo polar Antártico. Por: J.C. Malone [Listín Diario]
