Si 15,541 haitianos cotizan en la Seguridad Social, significa que son residentes legales. Sin embargo, las tropas de Migración en sus persecuciones arbitrarias, también a ellos se los llevan y afectando seriamente negocios y empresas y la reputación humanista de nuestra nación

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Bueno, es hora de que en el Gobierno decidan que es lo que quieren. Pues una cosa es que se deporten los extranjeros ilegales y que aquí se discrimina, porque solo se hace contra los haitianos en tanto a los venezolanos se les deja que sigan violando la ley migratoria y otra, que por la manía persecutoria que solo responde a un estallido de emoción presidencial, a la inmigración venezolana, la madre de los negocios de alterne, sexuales y de cuanta variable de prostitución y hasta droga existen e incluido robos y sicariato, se la deja tranquila y lo que no puede ni debe ser.

Este gobierno y solo por politiquería, destrozó e interrumpió el masivo programa de regularización del extranjero indocumentado que llevaba a cabo y con éxito en el gobierno anterior. Ahora los dominicanos nos hemos quedado sin pito y sin flauta y todo el mundo persiguiendo a todo el mundo y como los dominicanos somos tan negros y mulatos como los haitianos, las brigadas de Migración y compuestas por negros y mulatos, se lanzan ferozmente, violentando derechos y aplastando a quien sea.

Esta práctica tan atentatoria a los derechos humanos no puede ni debe ser y porque es una de esas de origen nazista, que alientan que sea practicada por los anormales ideológicos del Instituto Duartiano, el conjunto de negros y mulatos y una parte, hijos de inmigrantes árabes y otros, nacidos en bateyes cañeros criados por familias de trabajadores y braceros haitianos, a quienes abusivamente, esos extremistas les discriminan, golpean y se quiere estigmatizar, a la vez que acuden a sus mercenarios mediáticos para que los persigan y zahieran creando un clima de ingobernabilidad social más que preocupante.

En resumidas cuentas, Abinader debe parar lo que en la practica es una abusiva persecución racista y anti haitiana contra individuos, quienes en la mayoría de los casos trabajan en este país, pagan a la seguridad social y quienes se integran de inmediato a nuestra sociedad, no así los indocumentados venezolanos, que son lo mas parecido a perros vestidos de gente y por su afán de mirar sobre el hombro al dominicano.

Nosotros solo vamos a hacer esta pregunta: ¿Qué pasaría aquí, si un mínimo de 300 mil trabajadores haitianos decidiese ir a la huelga indefinida y los principales motores de la economía colapsaran al instante, cree Abinader que con los perros de presa que tiene en Migración podría resolver la problemática?

Búsquese pues una solución racional al problema artificial que ha sido creado y por un pique que el presidente de la República cogió al escuchar lo dicho por un atrevido funcionario de la ONU, que creía que a este país se le podrían trazar pautas y como si fuera el estado fallido de Haití. Si los trabajadores haitianos hacen un paro general, nuestra economía temblaría de lleno y ahora mismo, lo que se está haciendo y cometiendo, es un gran y vil abuso y Abinader y aunque no le guste, tiene que saberlo.

Desde luego, al plantear nuestra critica, lo hacemos como medio de comunicación y de información de masas, que no está comprometido con ningún sector, político, empresarial o de poder fáctico  y por lo tanto, al tener una independencia de criterio que otros medios y periodistas carecen, en cierta forma podemos actuar como contrapeso ante el aluvión de desinformación y noticias falsas que afectan la psiquis y emociones de mucha gente, que no sabe ni quiere analizar y mucho menos descubrir la verdad de lo que acontece.

También lo hacemos, porque estamos observando y con cierta inquietud, que de buenas a primeras y en la medida que el presidente Abinader adquiere experiencia y madurez en el ejercicio del poder, poco que mucho y a ojos de la burocracia estatal y a todos sus niveles, sus miembros empiezan a tenerle miedo al gobernante y mucho más el funcionariado y el que a estas alturas y de acuerdo a nuestras fuentes, si el presidente no solicita un expediente, absolutamente nadie se atreve a participarle que ya está listo, generándose entonces una especie de retranca burocrática que impide que las decisiones se tomen dentro de un tiempo correcto.

Hay casos, de ciudadanos a los que oficiosamente, conocieron que un expediente suyo el mandatario lo había autorizado para que se conociera y para que luego que estuviera listo se le presentara y más de seis meses después, el incumbente a cargo no se atreve a presentárselo y dizque para evitar, que al accionar de ese modo se pudiera sospechar que tenía interés personal en el mismo.

Cuando ese tipo de situación se da y con toda la demostración amplia de capacidad de trabajo de Abinader, la administración se atrasa y que es el resultado peor que un gobierno dirigido por un presidente ágil de mente y respuesta pudiera tener y por un hecho capital simple: Que, si los burócratas le cogen miedo, entonces el aparato burocrático del Estado se paraliza o se estanca.

Justo por ello ha sido y en el caso del control migratorio, que, por la incapacidad e incompetencia de funcionarios de gobiernos anteriores, NUNCA el sistema migratorio ha sido debidamente regularizado y de ahí que la situación cada vez vaya a peor y sin visus de que lo mal hecho pudiera corregirse.

Nuestro ánimo está pues, entre los millones de dominicanos que entendemos que el sistema migratorio no sea uno de persecución nazista contra extranjeros, que en el caso de los haitianos, no han sido debidamente documentados por la discriminación racial que existe en contra de ellos y dado que Haití es un estado fallido que tiene más de 25 años sin entregar la documentación de identificación legal y de pasaporte, que como Estado le corresponde y que el Estado Dominicano aprovecha para mantener el corrupto sistema ilegal no regulador de la extranjería legal.

Al irnos y cómo nación, por semejante derrotero, este país se expone a ser acosado y acusado internacionalmente como uno que protege políticas de apartheid y de absoluta discriminación racial y en cuyos desastrosos efectos de propaganda perniciosa anti dominicana, guardan relación los miembros de la burguesía y grupos gobernantes haitianos, quienes en ese punto tienen “vara alta” entre organismos internacionales profundamente anti dominicanos.

Consecuentemente, insistimos y en cuanto a que el presidente Abinader, no solo debe parar las persecuciones arbitrarias que se están presentando para alarma de todos, sino que definitivamente y por aquello de la continuidad del Estado, retome las políticas de registro de extranjeros indocumentados que hasta julio de 2020 y desde el 2016 se estaban implementando estupendamente.

Mientras tanto, da pena ver como el escarnio cae sobre el buen nombre de nuestra nación y por los excesos en Migración y la incompetencia e incapacidad y cobardía, de un cuerpo diplomático que no sabe o no quiere salir en defensa de su gobierno y país.

¿Debería sorprender, que digamos, que, si 15,541 haitianos cotizan en la Seguridad Social, significa que son residentes legales? Sin embargo, las tropas de Migración y en sus persecuciones arbitrarias, también a ellos se los llevan y afectando seriamente negocios y empresas y la reputación humanista de nuestra nación. (DAG)