William Byron se libró fortuitamente de los feroces choques en la recta final de la Daytona 500 que eliminaron a varios contendientes que competían por la bandera a cuadros y lo dejaron con una segunda victoria a la vista.
Aun así, al estar en noveno lugar a falta de una vuelta para el final de la prórroga, las probabilidades parecían estar en contra del piloto del Chevrolet Nº 24 para escapar ileso del resto de la carrera, o incluso tener tiempo suficiente para lograr la victoria de regreso.
Gracias a un choque más, Byron hizo un viaje limpio en su última vuelta para escapar del caos y correr hacia su segunda victoria consecutiva en la Daytona 500. Esquivó una serie de choques al final de la carrera que eliminaron a varios contendientes y enviaron al piloto de Hendrick Motorsports al carril de la victoria el domingo por la noche en el Daytona International Speedway.
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«No todo es suerte para ganar dos veces seguidas», dijo Byron.
Tal vez no. Pero Byron ciertamente estuvo en el lugar correcto al correr cerca del muro exterior en el tiempo extra para convertirse en el primer ganador consecutivo desde Denny Hamlin en 2019-20.
Byron aprovechó otro gran desastre en la última vuelta (NASCAR no quitó la bandera amarilla y dejó que el grupo corriera hasta el final) y sufrió otro desgaste familiar en el Daytona International Speedway.
«Obviamente es muy especial», dijo Byron. «Es una carrera increíble, y obviamente hay muchas carreras locas esta noche y muchos empujones y empujones».
Byron, de 27 años, se aferró a la victoria después de dos demoras por el clima que totalizaron más de 3½ horas, y con el presidente Donald Trump listo para ver el resto de la carrera en Florida, después de haber liderado a los pilotos en dos vueltas alrededor de la pista en su limusina presidencial fuertemente blindada conocida en Washington como «La Bestia».
Hendrick Motorsports ganó su décima edición de la Daytona 500 y rompió el empate con Petty Enterprises por el récord.
«Obviamente, fue una suerte que nos haya salido bien», dijo Byron. «¿Una locura? Sí. Sinceramente, no puedo creerlo, pero aquí estamos».
Byron se convirtió en el piloto más joven en ganar varias Daytona 500, rompiendo el récord que tenía Jeff Gordon, también con el N.° 24. Gordon, miembro del Salón de la Fama y cuatro veces campeón de NASCAR, es ahora el jefe de Byron como vicepresidente de Hendrick Motorsports.
Gordon hizo un gesto con el pulgar hacia arriba cuando le dijeron que Byron había roto su récord de ganador en dos ocasiones más joven por cuatro meses.
Fuente: Hoy
