El ministro de Economía
El ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Miguel Ceara Hatton, informó que el Gobierno seguirá racionalizando el gasto lo más que se pueda para la ejecución de obras prioritarias. Sin embargo, Ceara Hatton aclaró que el país va a pagar un costo porque con los niveles de recaudaciones actuales no da para hacer las obras que necesita y demandan los ciudadanos en materia de infraestructura, salud, educación entre otras.
Ceara Hatton habló en el programa El Despertador que se transmite por Color Visión.
Señaló que "hay un problema estructural en la fiscalidad de República Dominicana que en algún momento se tendrá que resolver" y recordó que República Dominicana se encuentra entre las naciones que tienen la presión tributaria más baja.
El ministro de Economía explicó que, si nos comparamos con 192 países del mundo, el 70% tiene una presión tributaria superior al 20%, mientras que, en América Latina, el promedio es de 27%, y en la República Dominicana es de 14.1%.
Precisó que en este momento no hay las condiciones para hacer una reforma fiscal, aunque técnicamente se necesita y va a ser necesaria en algún momento.
Exportadores: es un apoyo a sectores productivos
La presidenta de la Asociación Dominicana de Exportadores (Adoexpo), Elizabeth Mena, vio con beneplácito la decisión del presidente Luis Abinader de retirar la propuesta de reforma fiscal, lo que manifiesta un evidente apoyo al sector privado y los aparatos productivos nacionales.
La presidenta de Adoexpo destacó que “hoy más que nunca la paz social y la estabilidad es necesaria para impulsar la producción y las exportaciones para convertir a la República Dominicana como el Hub Logístico que tanto aspiramos”.
Indicó que “aplaudimos las acciones que se llevan a cabo para lograr una política de redefinición de los gastos y de ahorros del actual Gobierno.
Miguel Collado Di Franco, economista Senior y director de investigaciones del Consejo Regional de Estrategias Económicas y Sociales (CREES), indica que los ciudadanos necesitan dinero en sus bolsillos para mantener sus hogares; los emprendedores, dinero para poder expandir sus negocios y poder generar más empleos. Eso sería trabajar juntos, Gobierno y sociedad civil.
El Gobierno debe permitir que la sociedad prospere. No gravar con más impuestos y la alternativa es realizar una verdadera reforma tributaria el próximo año, reduciendo tasas y ampliando bases. Eso permitirá mayores ingresos, dijo.
Cree que la opción actual consiste en administrar eficientemente los recursos.
Para el economista Luis Manuel Piantini la verdadera reforma tiene que comenzar con recortar gastos que están en excesos, colectar más impuestos con las actuales tasas reforzando la administración impositiva, eliminando subsidios innecesarios que ya agotaron el tiempo de su justificación.
Además, manteniendo prudentes políticas macroeconómicas que estimulen el gasto productivo del sector privado para la creación de empleos formales, y hacer reformas que reduzcan el tamaño del sector informal que actualmente es del 57% de la economía, disminuyendo trabas burocráticas y el costo para su transformación hacia la formalidad.
“Creo que el discurso del presidente fue valiente, realista y prudente para no crear ruidos, frente a un panorama Internacional que se está oscureciendo rápidamente, presagiando tiempos tormentosos, que pueda repercutir en alejar inversiones y reducir el crecimiento”, afirmó.
Rafael Espinal, coordinador de la Facultad de Economía de INTEC, afirma que la decisión del presidente es correcta. Frente a un panorama de precios del petróleo en ascenso, inflación importada por alza de “commodities” y transporte marítimo, el costo de oportunidad de la reforma es demasiado alto.
“Todavía el Gobierno tiene espacio para cubrir déficit de 2022 con financiamiento como está previsto en proyecto de presupuesto. La reforma es necesaria y un mandato de la END, pero ante las circunstancias económicas actuales el Gobierno ha actuado correctamente al posponerla para cuando los mercados mundiales y el entorno económico nacional presenten mejores condiciones”, explicó que el Presidente, de forma prudente, pospuso la reforma fiscal para ser discutida el próximo año y poder alcanzar consenso con los distintos sectores de la sociedad.
Además, permitirá una mejora en calificación de la deuda por parte de las agencias internacionales. La decisión de posponer la reforma afectará, aunque en una medida menor a la esperada, el riesgo país.
Para el decano de Economía de la UASD, Antonio Ciriaco Cruz, cree que el Gobierno tiene varias fuentes para captar recursos este y el año que viene, y eso se ve al analizar la ejecución presupuestaria donde aparece una “especie de sobrante” de RD$110,000 millones que por diversas razones no ha ejecutado y le permitirá cerrar el año con un déficit muy bajo, de menos de 1% del PIB.
Ciriaco Cruz valoró el esfuerzo en redimensionar el gasto público, mecanismo que debe continuar y combatir la evasión del ITBIS y el Impuesto Sobre la Renta y la eficiencia en Aduanas.
“Evidentemente que el hecho de retirar la reforma en un contexto de presiones inflacionarias quita presión por parte de sectores importantes porque si hubiese traído un impacto muy grande en los sectores vulnerables “, dijo al recordar que este año la inflación superará la meta del Banco Central y solo queda mejorar la eficiencia del gasto público y combatir la evasión para ahorrarse recursos y destinarlos a la inversión pública.
El economista Fabricio Gómez Mazara afirma que el Presidente, de forma prudente, pospuso la reforma fiscal para ser discutida el próximo año y poder alcanzar consenso con los distintos sectores de la sociedad.
Sin embargo, la sostenibilidad del actual modelo económico en el mediano plazo depende de un aumento de los ingresos tributarios que no solo permita generar superávit, sino que reduzca el pago del servicio de la deuda como porcentaje del presupuesto.
Además, permitirá una mejora en calificación de la deuda por parte de las agencias internacionales. La decisión de posponer la reforma afectará, aunque en una medida menor a la esperada, el riesgo país.
El economista Luis H. Vagas asegura que no presentar la propuesta preliminar de reforma fiscal constituye un grave error y, al mismo tiempo, bloquea las posibilidades de crear condiciones favorables a la doble superación de la crisis económico-financiera y sanitario-social a nivel nacional e internacional, en particular la marcha paralela de los crecientes déficits fiscales y consecuentes endeudamientos interno y externo con vocación de impagables.
Esta excusa presidencial se presenta en un escenario y coyuntura, en gran medida mediático, de rechazo a la revisión de la fiscalidad nativa sobre la base de interpretaciones erróneas relacionadas con la actual depresión y pandemia y la fase de recuperación de las actividades productivas y laborales en curso.
Además, de la incapacidad gubernamental de reconstrucción de un acuerdo multisectorial viable, a causa de múltiples contradicciones partidarias, gubernamentales y empresarias.
El economista Jaime Aristy Escuder considera necesario mejorar las recaudaciones y señala que con solo eficientizar el Impuesto Sobre la Renta en las personas jurídicas que hoy se encuentra en un 31% por debajo de la eficiencia promedio de América Latina y el Caribe la recaudación aumentaría un 0.9% del PIB. Esa medida aportaría ingresos de 0.2% del PIB por encima de la presupuesta de elevar la tasa de 27% a 30%. En el caso del ISR a las personas físicas, cuya eficiencia recaudatoria está 18% por debajo de la región ALC aumentaría casi un 3% del PIB, más que si se subiera la tasa de 25% a 35%. Escuder entiende que aumentar las tasas eleva la inequidad del sistema tributario. Asegura que con la reducción de la evasión tributaria representaría en los ingresos tributarios un 0.4% del PIB. [Listín Diario-Ojo]
