En una demostración de que también él es muy capaz de írsele al cuello a sus adversarios y dejándoles golpeados en la arena pública, esta tarde el presidente Luis Abinader y con el pretexto de una aparente rendición de cuentas sobre sus dos años se gestión, lanzó el ataque más rudo que en los últimos 20 años un presidente en ejercicio hubiese emitido contra sus adversarios más empecinados, en este caso, los dos expresidente Danilo Medina y Leonel Fernández, a los que les enrostró el gasto descomunal en el que incurrieron en determinadas obras públicas y de las que él, ahora y haciendo precisas comparaciones, dejó por los suelos su supuesta honestidad y decencia en el manejo de los recursos públicos cuando fueron gobiernos.
Por la reacción del público atrapado que Abinader tenía frente así, allá en Santiago y a los pies del monumento a la Restauración, se comprobó el impacto positivo que sintió el público al ver y comprobar como su presidente se lanzaba al ruedo político y le tiraba en cara los desafueros cometidos en los gobiernos de los dos expresidentes, en tanto desde las redes sociales, aquello era de locura, viendo como “la primera persona" le sacaba colores a Danilo y a Leonel, quienes a distancia, lo único que podían hacer era morderse sus labios y esperar ocasión propicia para ripostar.
Mientras tanto y en una escala de cero a diez puntos, Abinader logró un diez en materia de golpe propagandístico devastador y lo que, de seguro para los próximos días, su discurso le devolverá un amplio incremento de simpatías a nivel popular y mucho más, cuando ya es tan evidente que los motores de la reelección presidencial constitucional han sido puestos en marcha. Abinader sencillamente sorprendió y se lució. Felicitaciones. (DAG-OJO)
