lunes, junio 17, 2024
InicioDe aquí y de alláLa política, así como las relaciones entre las naciones, siempre es una...

La política, así como las relaciones entre las naciones, siempre es una formidable lucha de intereses, pero de ahí a exagerar, manipular y mentir propagandísticamente hay un abismo y por eso, a la larga, la verdad siempre surge

Es increíble, pero tan pronto los intereses políticos en las naciones surgen de forma atropellante, tarde o más temprano los ciudadanos no escapan al conjuro de la desinformación y la extravagancia y escandalosa, procurando que las emociones y en su desenfreno, ofusquen a la mayor cantidad de personas y ante lo cual y cuando menos se venga a ver, la crispación y el falso nacionalismo toman lugar y en momentos cuando los tiempos obligan a que la sensatez se imponga y no la mentira, el engeño o el desasosiego.

Ni hablar cuando se está en campaña electoral y a los implicados en ella, políticos, empresarios y público y ni que decir de los candidatos, se les mete una desesperación por ganar y que se aviva en la medida que se está a menos de 70 días de unos comicios y que es el caso dominicano actual y frente a las elecciones municipales del 18 de febrero próximo.

Ya se ha empezado a ver el calendario de atrocidades propagandísticas con el que partidos y candidatos y agotando la pauta que les indica la partidocracia, lo aplican entre sí y no para mejorar las instituciones y mucho menos el discurso electoral y sí para alentar la mayor cantidad de descalificaciones y que de ser necesario inciten a una violencia anímica que afecte sentiblemente la paz social.

Por eso, desde el momento que este escenario se observa, se entiende que los dominicanos no hemos aprendido nada respecto al debate político y que, sin duda, de continuar el festival de diatribas, todos en este país terminaremos en una grave confrontación a lo caníbal y que, por lo visto, no se detendrá ni cuando los actores principales vean caer y derrotados a sus principales rivales.

Para mayor escarnio, la gran mayoría de los medios de comunicación y dado que una gran parte de sus miembros son unos analfabetos funcionales y están maleados por las peores prácticas de corrupción y de uno u otro modo, alientan que la sociedad se muestre dividida y que la población se ahonde en las peores predicas de insultos y bajezas a lo alofoke y avivándolo en esos lupanares mediáticos que hablamos los otros días y que se encuentran -la mayoría- cobijados en las infames redes sociales.

En este sentido y como nunca se vio en elecciones anteriores, hay la impresión de que estas de ahora, municipales y también las presidenciales, se van a dilucidar a lo salvaje, es decir, a agitar las emociones y dentro de un ambiente de puro delirio, que, de seguro, muchos dominicanos serán víctimas de su influjo.

Ahora el reperpero tiene que ver, de cómo los candidatos engañan a más a los potenciales electores, mientras las maquinarias partidarias emiten su ola de descrédito institucional contra quienes están en el poder, mientras estos, no se guardan nada para difamar, amenazar y acobardar a quienes se entiendan sus disidentes.

Y si a lo anterior le agregamos que todas las elecciones en este país y en particular desde el 2000 a la fecha, los partidos les roban el derecho a elegir a los votantes, que entonces y por lo de ahora, se observa, que unos y otros entienden que deben actuar a la desesperada y en consecuencia, es imposible entender que se podrán tener unas elecciones auténticamente libres, y lo que planteamos, al ver cómo es que en estos tiempos la partidocracia calienta los motores de la difamación e injurias y con el propósito, de que al final, la mayor cantidad de electores se vayan a los puños.

¿Cuál es la razón de todo este desorden?, que ninguno de los partidos implicados en candidaturas, ninguno quisiera perder fuerza decisiva y debido a que, si el voto se diversifica y aun en sus propias filas, este hecho no permitiría que hubiese una mayoría aplastante en las cámaras legislativas como en los gobiernos municipales y para que, de manera total, la dictadura partidocrática se mantenga y aun cuando sea en base a una bandería preponderante y otras auxiliares.

¿Qué factor es el que ahora se está discutiendo tras bastidores? Que quienes vayan a votar sean los militantes políticos y no los ciudadanos, pues de esa manera, la partidocracia podría salir mucho más fortalecida de lo que está en estos tiempos de tantas incertidumbres y engaños.

Es muy cierto y esto hay que decirlo, que en este país muy pocos medios y periodistas se atreven a tocar este tema y de tan dependientes que se encuentran de todos los intereses, políticos, sociales, económicos y gubernamentales en juego. Pero alguien debe decirlo y hacer la diferencia y mucho más, cuando lo que observamos, es que desde la Junta Central Electoral y para abajo, sus integrantes, ninguno quiere que la dictadura partidocrática se debilite.

En este plano y a este tiempo, nuestro gran candidato es la preservación de la libertad de escogencia de los electores y la aniquilación de la dictadura partidocrática en sí. He ahí la muestra hiriente de un candidato y de un partido opositor, que expresó ayer y sin aportar ningún tipo de prueba testimonial, que supuestamente la Junta Central Electoral no es confiable “para nadie” y que supuestamente en el gobierno han buscado jaqueadores para que penetren en el listado de electores.

Sin duda, quien lo expresó, parecería que entiende que con este tipo de “denuncia” tan escandalosa logrará favorecer a su partido, cuando en la realidad, lo que ha hecho es pretender desalentar a los votantes y estos, a salir en estampida de las urnas y con lo que el “denunciante” está incentivando una abstención anormal y desproporcionada de acuerdo con los registros y parámetros existentes.

Por el otro lado, estamos observando una cierta tendencia de denuncias contra República Dominicana y con diversos pretextos y todas, tratando de afectar emocionalmente a los ciudadanos de este país, pretendiendo hacer creer que son lo peor.

Así lo vemos en denuncias continuas en las infames redes sociales contra la nacionalidad dominicana o acusaciones sin fundamento de individuos de entidades defensoras de los “derechos humanos”, mientras desde Haití se observan esos indicadores de propaganda alienante incitando a odiar lo dominicano y como cierre, la puesta en duda de los órganos jurisdiccionales del Poder Judicial, emitiéndose desde el Departamento de Estado de EEUU y este como agente político del gobierno de Abinader, emitiendo una soflama dirigida a imponer la servidumbre obligada como potencia geopolítica, a esta nación.

Con sanciones o señalamientos de ese tipo contra ciudadanos dominicanos que han ocupado posiciones públicas y bajo la etiqueta de corruptos y sin que haya habido sentencia condenatoria contra estos y lo que indica, que lo dicho por la burocracia diplomática estadounidense es parte de su injerencismo como agente político gubernamental extranjero y con lo que se asesta un duro golpe contra la credibilidad de las instituciones de justicia nacionales y de refilón, una sutil advertencia para que los dominicanos recuerden que cuando a EEUU le dé la gana y con el pretexto que fuere, les despoja de sus visados.

Para remate, el papa Francisco dijo ayer que, si a los inmigrantes no se les integra, hay peligro para los países y lo que ciertamente no es un criterio absolutamente exacto. Al respecto solo hay que ver los esfuerzos que aquí se han hecho en los últimos diez años para la integración de inmigrantes haitianos y el daño tan terrible que esta nación ha experimentado y ni hablar sobre lo que el particular vive Europa y ni se diga, Francia.

A nuestro modo de ver, en lo que respecta al aspecto internacional, creemos que este país se encuentra enfrentando lo más parecido a una guerra de diatribas e insultos contra la nacionalidad dominicana y lamentablemente, ni el gobierno y tampoco la partidocracia, prestan la debida atención a esta situación, de suyo tan conflictiva y por lo interpretativa e infamante.

Creemos entonces, que los dominicanos debemos estar ojo avizor. Por un lado, darnos cuenta de las trampas de los políticos en su pretensión de que la dictadura partidocrática continue y por el otro, enfrentar la cadena de infundios, tergiversaciones, mentiras y manipulaciones que desde diversos ámbitos internacionales se están propagando contra esta nación y que es una situación, que no es que haya que darle la menor importancia y menos, cuando desde un tercer país se nos quiere colocar en el peor de los descréditos, diciéndonos que condena a nuestros “corruptos” y porque aquí y supuestamente, todos somos incapaces de hacerlo.

Nuestra preocupación es alta y no la escondemos y por eso decimos, que la política, así como las relaciones entre las naciones, siempre es una formidable lucha de intereses, pero de ahí a exagerar, manipular y mentir propagandísticamente hay un abismo y por eso, a la larga, la verdad siempre surge. (DAG) 12.12.2023

RELATED ARTICLES
spot_imgspot_imgspot_imgspot_img

LAS ÚLTIMAS NOTICIAS DE HOY

Encuentran muerto a Julio César de la Rosa tras ser reportado como desaparecido

Encuentran muerto a Julio César de la Rosa tras ser reportado...

0
El hijo del presidente de la Alianza Dominicana Contra la Corrupción (ADOCCO), Julio César de la Rosa Peralta fue encontrado muerto este domingo tras presuntamente...

Mas Populares