miércoles, abril 30, 2025
InicioDe aquí y de alláMientras los aranceles de Trump no se vean como otra oportunidad para...

Mientras los aranceles de Trump no se vean como otra oportunidad para competir, los industriales y financieros que solo saben serlo haciendo que los contribuyentes les entreguen capital de trabajo, nunca serán una genuina clase empresarial a favor de la nación y sí su peor mecanismo de explotación

En tanto en cualquier otra economía emergente o desarrollada, el empresariado se caracteriza por aportar sus propios recursos para emprender sus propias iniciativas empresariales y al Estado solo se le solicita que organice y cree el marco legal en el que todas las fuerzas productivas puedan competir en un marco de igualdad, en este país todo es al revés.

¿Por qué?, porque nuestros llamados empresarios, todo un amplio grupo de comerciantes y tenderos acostumbrados a tener negocios en la medida que se conectan con políticos de poder y extremadamente corruptos como corruptores, han sido incapaces de tener ese espíritu empresarial innovador que ha tenido el Estado en la Era de Trujillo (1930-1961) y que se inició justo treinta y pico de días después  que la parte sur este del territorio nacional y prácticamente toda la capital fuera destruida por el devastador ciclón de San Zenón.

A ese entonces, las aduanas estaban intervenidas por los acreedores internacionales y con EEUU a la cabeza y quienes de cada dólar que entraba se quedaban con 85 centavos. El gobierno sencillamente se encontraba sin liquidez y si somos indulgentes, prácticamente en quiebra y sin ni siquiera tener o contar con capital de trabajo.

Ricos, lo que se dice ricos, solo había tres fortunas: Vicini, Central Romana y un conjunto de empresarios del ron, pero el resto de la ciudadanía solo llegaba a clase media pobre. Aun así, Trujillo y sacando de abajo como decimos los dominicanos, emprendió una dura, firme y laboriosa obra de rescate y la que culminó el 21 de julio de 1947 con el pago de toda la deuda externa y por lo tanto, con la recuperación de las aduanas y a partir de ahí el Estado Dominicano volvió a tener ingresos propios.

Para el 1947, las huellas del ciclón San Zenón habían desaparecido y en su lugar, la capital nacional como otras ciudades y poblaciones, ya empezaban a mostrar los signos evidentes de la prosperidad material que ya para el 1955, era indudable que la nación y su economía poseían y generándose una tímida clase media, de trabajadores, artesanos, emprendedores y de industria ligera.

El país mostraba prosperidad por todas partes y se tenía la moneda nacional, el peso oro con un valor muy superior al dólar estadounidense, en tanto el resto de las monedas eran confeccionadas en plata y con un grado de pureza de 925 de mil.

Lo anterior significaba, que esta economía, al disponer de una moneda tan fuerte y al no existir un grado o nivel de inflación que mortificara, los bienes y servicios y gracias al valor del peso oro, facilitaron las cosas para que la economía se desenvolviera sin ningún tipo de sobresaltos y que un salario en la empleomanía pública de 60 a 100 pesos, que era el promedio, tenía un poder adquisitivo diez veces su valor.

También hay que agregar, que como medida precautoria para que la prosperidad no se perdiera, Trujillo creo un holding nacional tras la llamada “oficina privada del Generalísimo”, desde la cual se administraban todas las empresas y negocios públicos y con una eficiencia de administración, que, hasta ahora, nunca más el Estado ha podido disponer.

Esto quiere decir, que Trujillo, no que se hubiese sentido que era el dueño de semejante fortuna y activos, sino que públicamente, decía que todo eso era propiedad del pueblo dominicano y como tal, creó y organizó una alta burocracia que administraba todos esos bienes y cuyos administradores, ya desaparecido Trujillo, en la mayoría de los casos se hicieron con esas empresas y al tener legalmente el usufructo de estas en calidad de testaferros.

Megaempresas como el Consejo del Azúcar (CEA) o la Corporación de las empresas estatales (Corde), las grandes fincas del Estado (CEAGANA) los servicios tecnológicos, la fábrica de armas y la otra de pólvora etc. y gracias a que el llamado gobierno de facto del Consejo de Estado se inventó un ministerio exclusivamente “para expropiar los bienes de Trujillo” fueron robadas o saqueadas y ahora son parte de grupos empresariales y financieros o recuérdese que el otro gobierno de facto del Triunvirato, en realidad tres gobiernos y los dos últimos, modificando los actos notariales auténticos que tenían una estructura absolutamente legal y quienes impusieron los llamados actos notariales “bajo firma privada” (una simple declaración de: «Trujillo me lo robó») bastaba para que la propiedad o empresas fueran entregadas a los nuevos «dueños» y que fueran el instrumento de expropiación forzosa que legitimaba todos los bienes y activos robados al Estado y con el pretexto de que “el ladrón de Trujillo se los había robado al pueblo dominicano» y lo que se hizo a espaldas del legitimo dueño, el pueblo dominicano y mediante decretos-leyes, lo que significa, que ahora se pueden impugnar mediante la impugnación que un legislador que se respete lo hiciera, pues ese saqueo y por sus hechos delictivos no perimen.

Fue de este modo que nació el Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP) y sus 75 empresas subsidiarias y 15 organizaciones empresariales conexas y ahora con una abrumadora categoría legal mediante el decreto presidencial que creó el llamado Consejo Nacional de Competitividad (CNC) donde las 38 fortunas nacionales más importantes y abarcando los mundos empresarial y financiero, tienen el poder de decidir sobre los recursos y presupuestos públicos y quitándole arbitrariamente al Estado y vía el gobierno de turno, el poder de Administración y tan absoluto, que un gobierno plutocrático como el actual, que encabeza -no que preside- el presidente Luis Abinader, viene siendo muchacho de mandados de esa oligarquía que tiene bajo secuestro la economía nacional y que decide  en qué gasta el Estado el dinero de los contribuyentes y a quienes el gobierno deberá de entregarles y entre empresarios y banqueros o contratistas de todo, los contratos de obras públicas y de servicios y hasta quienes pueden ser los ciudadanos que pueden trabajar en el Estado.

Por semejante saqueó de más de 500 millones de dólares, la República Dominicana adeuda a este día más de 75 mil millones de dólares de deuda pública externa, cerca de 50 mil millones de dólares de deuda interna hija de los propios empresarios y banqueros, recuérdese que para obtener un peso dominicano, no un peso oro, se requieren 63 pesos para conseguir un dólar estadounidense, la inflación agota el ahorro privado, con un indicador de más de un 47 % y lo terrible de que el dominicano no llega a fin de mes, mientras gobierno y  empresarios se hacen inmensamente ricos.

A este día, los contribuyentes y en lo que va de año, el gobierno les ha quitado cerca de 385 mil millones de pesos como capital de trabajo para empresarios y banqueros y para colmos, las ARS, administradoras de Riesgos de Salud, usufructúan más de un billón de pesos pertenecientes a los trabajadores y que reparten como capital de trabajo de empresas y bancos propiedad de las 38 fortunas que deciden en el CNC. Para más inri, todos los grupos económicos y financieros y junto al gobierno que los utiliza para cubrir sus déficits, también tienen acceso a esos fondos de las ARS y nadie da explicaciones.

Es decir y para decirlo crudamente, el gobierno plutocrático es uno delincuente, que en líneas generales malversa los fondos públicos en presupuestos mega millonarios de publicidad y propaganda, las obras públicas han retrocedido en calidad, la empleomanía pública está abultada en más de 400 mil empleados–votantes y  para lograr que el gobierno siempre gane las elecciones y como el CNC es el dueño de la concentración de medios en pocas manos y ahora los medios alternativos en internet, todos digitales y con grandes presupuestos públicos, tienen como objetivo prostituir a la atrapada opinión pública y a la ciudadanía y justificar la entrada del narcotráfico, el lavado de activos y la evasión fiscal y estos como instrumentos del gobierno plutocrático para corromper y envilecer a la población y a todos los organismos públicos. En pocas palabras, esta economía está siendo saqueada por una claque de depredadores y ladrones de cuello blanco.

La nación pues, ha retrocedido a unos niveles de degradación moral y administrativa y teniendo una clase gobernante tan corrupta y corruptora, que ahora y con el asunto de la imposición de aranceles estadounidenses de un 10 % a nuestras importaciones, lo que debería obligar a buscar nuevos mercados. los grupos económicos y financieros ya están buscando diseñar un nuevo “esquema de negocios”, por medio del cual, contribuyentes y consumidores sean los que paguen la diferencia de lo que el gobierno plutocrático y sus asociados entienden que van a perder.

A nuestro modo de ver, esa plutocracia está abusando y como nunca, de la República y poco le importa que de cada cien dominicanos y de una población de 11.5 millones de personas dentro de una economía emergente, 7.0 millones de personas ya se encuentren bordeando la pobreza extrema. La nación pues, está muy mal conducida y solo un milagro evitaría el estallido social, que en cualquier momento podría hacer explosión y desde que la ciudadanía, civil y militar se dé cuenta y haga conciencia, de que no se puede continuar viviendo dentro del terrible y actual estado de cosas tan injusto y abusivo.

En resumen, mientras los aranceles de Trump no se vean como otra oportunidad para competir, los industriales y financieros que solo saben serlo haciendo que los contribuyentes les entreguen capital de trabajo, nunca serán una genuina clase empresarial a favor de la nación y sí su peor mecanismo de explotación. Con Dios. (DAG) 06.04.2025.

 

 

RELATED ARTICLES
spot_imgspot_imgspot_imgspot_img

LAS ÚLTIMAS NOTICIAS DE HOY

La regla no escrita de los asesores de Trump para lidiar...

0
La revista The Atlantic publicó este lunes una entrevista con el presidente de EE.UU., Donald Trump, en la que no solo se muestra el punto de...

Mas Populares