Pequeños detalles que con buena voluntad pueden ser resueltos. Deudas por expropiaciones y traslados de jurisdicción de notarios públicos

0
201

Ahora que la inflación importada realmente está haciendo estragos en la economía de la gente, muchos medios y periodistas, entendemos, que si el presidente de la República por un lado o el presidente del Poder Judicial por el otro, demostraran buena fe hacia los ciudadanos a los que el Estado les adeuda millones de pesos por expropiación de propiedades no pagadas y también por mercancías no pagadas a tiempo, fácilmente que muchas situaciones podrían ser corregidas y aunque fuere provisionalmente y por un espacio no menor de dos años.

Por ejemplo, al existir la actual crisis de iliquidez y el gobierno no poder resolver tantas demandas insatisfechas, pensamos, que si Abinader dispusiera que en el Banco de Reservas o en el Bagrícola se abriera una ventanilla de crédito y exclusivamente para deudores del Estado por expropiaciones y de acuerdo a cada monto de deuda certificada por Hacienda, se facilitara un crédito no mayor de un 30 por ciento sobre la deuda pendiente y sin un pago desmedido de intereses, perfectamente que el gobernante podría resolver aceptablemente la profunda situación de iliquidez que tienen esos acreedores y sus familias. ¿Porqué no se piensa en este tipo de solución?, al fin y al cabo, la reelección constitucional está a la vuelta de la esquina.

Y lo otro. Todos los medios y periodistas conocemos, que las designaciones de notarios públicos están congeladas desde hace más de cuatro años, pero no así los traslados de jurisdicción. ¿por qué los miembros del Poder Judicial y en particular su presidente, Luis Henry Molina Peña, pone su mejor voluntad y para que las pocas solicitudes de cambios de jurisdicción se hicieran y algunas de ellas motivadas por un profundo estado de necesidad originados en problemas delicados de salud y ya superados? Ojalá que el magistrado Molina Peña, pondere la situación y tome una decisión positiva al respecto. Sabemos de notarios públicos en la tercera edad, que se lo agradecerían profundamente y tanto a él como a los demás magistrados miembros del Consejo del Poder Judicial. (DAG-OJO)