Cómo quien escribe no es psiquiatra, ni sociólogo y mucho menos psicólogo, le resulta muy difícil y también desconcertante, entender el porqué en el gobierno y en su partido, se están dando tantas muestras de una incoherencia que un grupo en el poder desde tres años y pico no debería de estar mostrando y mucho menos dando a entender que tanto hay de desesperación y hasta de cierto sentido de derrota.
El domingo y en la capital nacional, hubo un acto proselitista regional mediante el cual, el oficialismo, que debió aprovecharlo para por lo menos asentar o fijar los ejes programáticos de las elecciones municipales en el Distrito Nacional y como programa de gobernanza para el llamado Gran Santo Domingo, en lugar de ello, lo que se vio fue una muestra trepidante de ese culto a la personalidad presidencial, que para muchos, es la razón del porqué el presidente Luis Abinader muestra públicamente determinada irritabilidad y poco interés en aceptar que se le critique con determinada reiteración.
Al mismo tiempo, sus subalternos en los ayuntamientos locales y para decirlo suavemente, parecería que no dan pie con bolas respecto a lo que tienen que hacer para demostrarle a la población, es decir, al electorado, no tanto lo que se va a hacer sino básicamente lo que ya se ha hecho en su beneficio y a lo que atribuimos y hablando en lenguaje de pueblo, a este espectáculo de tanto “bulto, allante y meneo” en todo lo relativo a la incesante maquinaria gubernamental de propaganda, que como hay que suponer, en comunidades donde todo el mundo tiene por lo menos un teléfono celular o donde hay una mayoría poblacional sobre los 18 años que está conectada a internet, que francamente, se observe que la población se está despegando o manteniendo distancia del gobierno y del PRM y por primera vez, disminuyendo su interés en el mismo presidente Abinader, su mensaje y hasta su obra de gobierno.
La situación es tan chocante, que todas esas plataformas en internet encuadradas dentro de los lupanares mediáticos en donde el mismo presidente da apoyos directos y casi de militantes y como son las que tienen la etiqueta alofoke, hasta esos reductos de contrapropaganda bruta, sus voceros y por primera vez, están dando signos de preocupación y llegándose al extremo, de hasta preguntarse, cuál sería su futuro inmediato si la reelección presidencial y el sesenta por ciento de las reelecciones municipales y legislativas fracasaran.
Para comprobarlo, solo hay que escuchar la plataforma que dirige un expresidiario y aparente lavador de activos y quien desde que materializó su “excursión” en la ciudad colonial con el anuncio de haber colocado y escondido 200 mil pesos para que el que los encuentre los hiciera suyos, generó un monumental desorden impulsado por un tigueraje barrial de cerca mil individuos entre juventud y adolescentes y lo que de inmediato alimentó la sospecha y ahora magnificada, de que el individuo también hizo aquel despliegue de convocatoria pública y como el mejor testimonio, de que si así lo quisiera, pudiera colocar entre la espada y la pared a toda la partidocracia y sus agentes políticos.
¿Dónde se demostró el alejamiento de que hablamos?, que, en la marcha del pasado domingo en las calles y barrios capitaleños, ahora en el PRM se le achaca a ese lupanar mediático la poca fuerza popular de la misma y a que esas plataformas mediáticas en internet y que atienden “las señales” del expresidiario, no se identificaron lo suficiente instando a los moradores de los barrios a que fueran a la marcha oficialista y ni siquiera al mismo individuo al que identifican con la palabra alofoke, no se le vió allí en persona y como correspondía, ya que también es “asesor de imagen” de la alcaldía distrital como de la dirección de Aduanas.
Por nuestras fuentes, hemos recibido el dato, de que el expresidiario y ahora que entiende que tiene fuerza suficiente para convocar miles de personas a la primera consigna que emita y dado que desde el domingo, ese grupo de alborotadores de micrófono y terror, asumen que ya ni el gobierno o el PRM tienen suficiente poder de convocatoria popular, parecería que el cabeza principal de ese grupo de agitadores quiere preservarse y de cara, a que si Abinader y Carolina pierden los comicios, entonces él pudiera estar en una posición negociadora aceptable frente a quienes desde la oposición resultaran ganadores el 18 de febrero y también el 18 de mayo en los comicios programados a esas fechas por la JCE.
Sin embargo y formulando un razonamiento a contrario y sobre todo, porque estamos atentos a la realidad geopolítica del momento, que entendamos y lo que ciertamente no deja de ser una atrevida especulación de nuestra parte y dado los antecedentes anarquistas de la matriz del PRM, el PRD de cuando la Guerra Fría, de que de pronto y ante la probabilidad de un triunfo electoral opositor y por lo menos para la cita eleccionaria de mayo 18, el gobierno aproveche y en particular los genios que se mueven en el llamado anillo palaciego, de que para todo perdido, mejor aprovechar el factor geopolítico y para suspender los comicios y prolongar provisionalmente el periodo del gobierno y entendiéndose, que lo de la fuerza militar internacional “humanitaria” a intervenir en Haití, para el 11 de febrero estuviera en el país vecino y allí, ello desatara los mil demonios.
Naturalmente, especular se hace bien y si lo que se quiere es que haya un lio y que no es nuestro interés, por eso preferimos especular a lo simple y para que quienes nos hagan el honor de leer nuestros análisis políticos de Estado, tomen por sí mismos sus propias deducciones.
Al presidente Abinader, para nada le creemos capaz de cometer torpeza semejante y mucho menos apadrinarla, pero viéndose como el anillo palaciego, abiertamente da la impresión de que influye más de lo prudente en su ánimo, que entendamos nuestra obligación y como medio de comunicación totalmente independiente a todos los poderes públicos y privados y ni que decir de su brazo mediático, alertar sobre este particular. Solo eso.
De ahí que digamos, que sorprendentemente, el gobierno está mostrando gran incoherencia, en tanto sus capitostes, parecería que solo saben dar palos de ciegos. ¿Qué les pasa? Con Dios. (DAG) 09.01.2024
