Hemos quedado poco que menos alucinados al descubrirse y en el despliegue de pruebas y evidencias concretas de como la cárcel de La Victoria es un entramado delictual a gran escala y con ramificaciones de empresa electrónica instalada al amparo de sus autoridades y de la oficina del asesor carcelario.
Pues solo así se explica, que ayer, una unidad del Ejército que entró a las instalaciones carcelarias por quince horas y apartando a las fuerzas policiales de la misma, lograra incautar un centro de retransmisión de señal de internet que permitía tener wifi a la cárcel y a la comunidad cercana y alimentado por una línea de fibra óptica que también facilitaba la instalación comercial de un servicio de internet.
E igualmente, ocuparon un servidor, un repetidor de wifi, 96 routers, 89 cámaras de vigilancia instaladas, que eran operadas y controladas por un interno, 29 switches de cámaras, además, fueron incautados 508 teléfonos móviles, 107 cargadores, 96 auriculares, una laptop, dos tabletas, 9 reproductores de DVD, 35 playstation, 10 controles de distintos aparatos, 8 inversores y 173 bocinas. De ahí que digamos que solo les faltó una estación de radio y televisión y una red satelital propia.
Estamos hablando de una verdadera asociación de malhechores a gran escala que funcionaba con una empresa formal de servicios telefónicos y la que obviamente contaba con la anuencia de las más altas autoridades carcelarias, policiales y hasta de gobierno.
Es inconcebible que esta grave situación se esté dando y con la que se demuestra, que nuestras cárceles son antros del crimen alentados por sus autoridades. En este plano, se demuestra también, que parecería que ya no es necesario tener recintos carcelarios, pues por lo que se está viendo, en La Victoria se funcionaba como una zona franca del crimen organizado.
¿Será por ello por lo que las nuevas autoridades en la Procuraduría General de la República (PGR) han metido como “cuerpo de delito" más de 60 edificios carcelarios construidos para la nueva cárcel de La Victoria y como el mejor pretexto para que la zona franca criminal se mantenga operando?
Para mayor desvergüenza, la crónica periodística, detalla que la operación de las unidades militares, de distintos cuerpos armados del Ministerio de Defensa, así como de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) permitió ocupar “312 objetos cortopunzantes tanto de origen industrial como de fabricación artesanal. Ocuparon 496.003 cigarrillos de una marca conocida (los cuales, además, son introducidos al país de contrabando por la frontera terrestre), dos uniformes de policía, una chamarra militar, 17 relojes, un teléfono fijo, 40 abejones para recortar, una calculadora y 720 abanicos. También se ocuparon 514 porciones de un vegetal verde, que se presume es marihuana, con un peso aproximado de 2,875.2 gramos y 6 porciones de un polvo blanco, presumiblemente cocaína, con un peso aproximado de 234 gramos”.
Alguien tiene que dar explicaciones y en el Poder Ejecutivo implicarse de lleno. Esto es una barbaridad incalificable que no tiene punto de comparación. (DAG-OJO)
