Sería bueno que el gobierno del presidente Luis Abinader y sus estrategas en políticas económicas, fueran pensando en las alternativas que nuestra economía tendría y al momento de que, en menos de tres meses, el barril de petróleo vaya a costar 380 dólares, precio que de seguro desestabilizaría todas las proyecciones económicas mejor estudiadas.
Acontece, que la UE dirigida desde Bruselas por una partida de burócratas y no por estadistas, se ha decidido por violentar el principio cardinal de la libertad de comercio y en una decisión, que en términos generales nunca podría ser implementada y como es esa de ponerle un techo y limite a los precios del petróleo y gas ruso.
Con la estúpida decisión, Europa es la que perderá su principal abastecedor y este, Rusia, redirigirá sus hidrocarburos y derivados que sí se lo están comprando otros países y economías a precio de mercado y lo que significa, que, por más absurdas sanciones económicas contra la nación eslava, su economía continuará boyante y sus ingresos aumentando cada vez más, mientras a contrario, los burócratas en Bruselas colocaran a los europeos en un panorama realmente de casi extinción.
El presidente Luis Abinader debería de ir pensando en alternativas de abastecimiento de derivados de los hidrocarburos y prepararse para el momento en el que nuestro principal “socio comercial” se decida por amenazar al gobierno nacional y por el “delito” de hacer lo imposible con tal de mantener la salud económica y financiera de nuestra nación a buen resguardo.
De paso a los bancos “dominicanos”, todos con sus bancos corresponsales en EEUU y con sus ejecutivos estadounidenses, a excepción del Banco de Reservas, cuyo cuerpo de administración es dirigido y está a responsabilidad de altos tecnócratas dominicanos, deberían de ir pensando en que alternativas implementarán al momento que se vean presionados por sus corresponsales estadounidenses. (DAG)
